Bajar de peso es un proceso que no surge de la misma manera en todos los pacientes, ya que depende de la forma en la que el metabolismo funciona en cada paciente. Para garantizar el objetivo es pertinente tener una dieta sana y equilibrada en donde consuman las cantidades adecuadas de cada alimento; a su vez, es crucial practicar actividad física con frecuencia.
Es importante mencionar que no se recomienda seguir las dietas e ingerir los remedios caseros que se encuentran en diversos portales de internet, ya que estos pueden generar un efecto rebote o incluso poner en riesgo la salud del paciente, pues cada plan de alimentación variará dependiendo del paciente.
El profesional idóneo para determinar los alimentos y las cantidades que debe comer cada individuo que desea bajar de peso, es el nutricionista. Es importante destacar que para bajar de peso no es necesario ayunar o aguantar hambre, simplemente es pertinente escoger los productos y alimentos adecuados, comer a horas, y determinar las cantidades adecuadas dependiendo de la persona.
Para alcanzar el objetivo de bajar de peso y que este se mantenga con el tiempo, la actividad física es fundamental para fortalecer los músculos y evitar que la piel quede colgante. Los ejercicios deben ser acordados junto con un profesional y variarán dependiendo de la edad del paciente y de si padece o no algún tipo de enfermedad considerable que le impide ejercer cierto tipo de actividades.
En medio de este proceso pueden ser involucrados diversas bebidas o alimentos que ayudarán al paciente a alcanzar el objetivo en mente; sin embargo, el solo conusmo de este tipo de alimentos no garantiza la pérdida de peso. Varios portales especializados en nutrición y avalados por profesionales en el tema mencionan que la avena es un excelente aliado en la dieta de quienes desean deshacerse de esos kilitos demás.
La avena ingerida en infusión desinflama el vientre y contribuye en la pérdida de peso. La avena tiene fibra soluble, por ende repercute de manera directa en la digestión, razón por la que es empleada con frecuencia en pacientes que padecen de estreñimiento.
El tipo de fibra soluble que tiene la avena se le conoce como beta-glucanos y no solo previene y trata el estreñimiento, sino que también genera saciedad y reduce los niveles de colesterol en la sangre; por ende, consumirla ayudará a que un paciente tenga menos ganas de comer y este más lleno por un periodo de tiempo más largo.
La Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) recomienda no consumir más de 50 gramos de avena al día. Para preparar una infusión de avena se es necesario mezclar una taza de avena en hojuelas con dos tazas de agua y dejar reposar durante la noche.
Al día siguiente, se debe colar la bebida y se debe poner a calentar hasta alcanzar la temperatura desea por el paciente, la recomendación es no dejarla hervir para no perder sus condiciones nutricionales. La bebida se puede ingerir en ayunas o se puede consumir entre comidas como merienda o acompañamiento de la misma.
Teniendo en cuenta que las condiciones de cada paciente varían, antes de ingerir la bebida mencionada anteriormente se recomienda contar con la aprobación de un profesional de la salud o del nutricionista que está llevando a cabo todo el proceso de alimentación de la persona. A su vez, es pertinente recordar que para bajar peso es fundamental consumir menos calorías de las que se gastan y para ello se necesita de un plan de alimentación adecuado y de actividad física frecuente; además la constancia y la disciplina son cruciales.