Un informe del Comité de Expertos de la Organización Mundial para la Salud (OMS) define la amebiasis como “una enfermedad de difusión mundial y según cálculos autorizados, su frecuencia representa un 10 % de la población del mundo, igual que la gravedad de la infección, varía de unas zonas a otras y puede aumentar en determinadas circunstancias”, precisa.
Por su parte, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, explica que la amebiasis es una infección intestinal provocada por un parásito conocido como Entamoeba histolytica. El microorganismo se transmite ya sea por el consumo de alimentos contaminados con heces, o de persona a persona.
Además, asegura que los síntomas más comunes de esta afección son: dolores estomacales, pérdida de peso, gases con frecuencia, cansancio o fatiga, dolor para defecar, fiebre, vómito y/o heces con sangre.
Es entonces que aunque la E. histolytica puede vivir en el intestino grueso, en algunos casos ocasiona distintas afecciones, unas más graves que otras como:
Diarrea
La institución de ciencia y salud, explica que la diarrea se caracteriza porque las heces son blandas y líquidas, y por consiguiente, una persona se dirige al baño más de tres veces al día.
Cabe señalar, que aunque la diarrea puede ser un síntoma de intoxicación o algún problema de salud, cuando esta perdura por varias semanas, se puede asociar con afecciones más graves, denominándose diarrea crónica.
La entidad americana precisa que se debe a un virus o a la contaminación de alimentos ingeridos. Asimismo, una persona que sea intolerante a la ingesta de ciertos productos puede tener diarrea.
Tua Saúde en una publicación, precisa que es importante mantener una dieta ligera, es decir, que el sistema digestivo no le cueste trabajo la descomposición de los alimentos, y que asimismo, contribuya en la flora intestinal, por lo que las cremas de verduras, los jugos naturales que no tengan azúcar añadida, o la gelatina, pueden ser productos favorables para tratar esta condición.
La diarrea puede provocar una severa deshidratación, por lo que se sugiere no consumir alimentos grasos o picantes, porque tienen un efecto irritante en el intestino. Por esto, el consumo de líquido, es primordial para combatir la diarrea, por lo que se recomienda beber suero casero o agua de arroz, por ejemplo.
Es importante estar bajo la supervisión de un médico por si las heces se presentan con sangrado, junto con fiebre y dolores en el abdomen. Entre tanto, una persona con esta afección puede notar una pérdida de peso notoria que no es favorable para su salud.
Colitis
Es la inflamación del intestino grueso que puede ser provocada por la enfermedad de Crohn o por intoxicación con alimentos, entre otros. Cuando no es tratada desarrolla úlceras, sangrado, incluso perforación en el colon.
Cabe mencionar que la enfermedad de Crohn “es una enfermedad crónica que causa inflamación e irritación en el tubo digestivo”, siendo entre sus síntomas más comunes la pérdida de peso y los cólicos, señala la National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases (NIDDK).
Absceso hepático
Es una acumulación de pus en el hígado, menciona MedlinePlus, causado por Entamoeba histolytica, que ocurre porque el parásito llega al hígado a través de la sangre.
El absceso hepático es común en personas que consumen alcohol, son pacientes de cáncer, tienen inmunodepresión o son mujeres en estado de embarazo. No obstante, existen otros factores que lo provocan.
Y aunque en el peor de los escenarios estas enfermedades pueden afectar la cotidianidad de una persona, se pueden prevenir con el lavado oportuno de alimentos y consumo de agua purificada, por ejemplo.