La tos es uno de los síntomas más frecuentes cuando se quiere expulsar de forma repentina y con fuerza de los pulmones. Como tal, la tos busca eliminar material de las vías respiratorias y proteger a los pulmones de las partículas inhaladas, por lo que puede ser voluntario o espontáneo.

De acuerdo con el portal web Manual MSD, existen varios tipos de tos, uno se denomina tos seca o productiva, con expectoración de sangre o flemas. Este último también se conoce como esputos y se trata de una mezcla de mucosidad, detritus y células expulsadas por los pulmones. Puede ser transparente, amarillento, verdoso o con trazos de sangre.

Por lo general, cuando la tos es muy intensa, se puede producir una distensión de los músculos o de los cartílagos costales, causando molestias para respirar, dolor torácico y tos repetida. Cabe mencionar que este síntoma puede aparecer porque las vías respiratorias están irritadas, pero su causa como tal depende de la duración del cuadro. Por ejemplo, cuando se presenta por menos de 4 semanas, se trata de una tos aguda y cuando dura más de este tiempo, se habla de una tos crónica.

Cuando la tos es muy intensa, se puede producir una distensión de los músculos o de los cartílagos costales, causando molestias para respirar, dolor torácico y tos repetida. | Foto: Getty Images

A continuación, se relacionan las causas particulares de cada tipo de tos:

Tos aguda

  • Infección de las vías respiratorias altas, incluyendo bronquitis aguda
  • Goteo postnasal (drenaje de las secreciones de la nariz hacia la garganta o faringe)
  • Neumonía

Tos crónica

  • Bronquitis crónica
  • Secreción postnasal
  • Irritación de la vía aérea persistente después de la resolución de una infección respiratoria (también denominada tos post-infecciosa)
  • Reflujo gastroesofágico
  • Enfermedad de las vías respiratorias reactiva/ asma

Para tratar este problema de salud, es importante acudir al médico para determinar el tratamiento a seguir dependiendo del tipo de tos que tenga el paciente. Adicional a ello, la medicina tradicional ofrece remedios caseros a base de infusiones naturales expectorantes que ayudan a eliminar la flema acumulada en las vías respiratorias. De hecho, la revista Mejor con Salud destaca la infusión de bugambilia o buganvilla, una planta que ha sido muy utilizada para tratar infecciones respiratorias y trastornos cutáneos.

La bugambilia tiene propiedades para aliviar la tos y eliminar toxinas. | Foto: Getty Images

Asimismo, sus propiedades antitusígenas la hacen una planta ideal para calmar la tos, al suprimir el reflejo del sistema nervioso que la produce. También tiene la capacidad de aliviar otras molestias asociadas a este síntoma como lo es el dolor de cabeza o el dolor abdominal. De otro lado, sus propiedades expectorantes permiten eliminar de forma rápida las secreciones acumuladas en los bronquios.

¿Cómo preparar la infusión de bugambilia?

Para aliviar la tos y eliminar las flemas, la revista en mención aconseja consumir esta planta medicinal informa de infusión. A continuación se da a conocer cómo se prepara:

Ingredientes

  • 1 taza de agua.
  • 6 flores de bugambilia.
  • 1 cucharadita de miel (opcional).

Preparación:

  • En primer lugar, se debe colocar la taza de agua a hervir y cuando esté en su punto de ebullición agregar las flores.
  • Luego, se debe esperar que el agua cambie de color para que se pueda retirar del fuego.
  • Enseguida, dejar reposar entre 5 a 10 minutos, colar y servir.
  • Finalmente, si se quiere, se puede agregar una cucharada de miel para mejorar el sabor de la infusión.
Una bebida con flores de bugambilia ofrece beneficios saludables al organismo. | Foto: Getty Images

Otros beneficios de la bugambilia

  • Trata los problemas estomacales: consumir el té de flores de bugambilia reduce como tal reflujo ácido, la indigestión, la diarrea y las úlceras estomacales.
  • Controla la diabetes: sus propiedades antidiabéticas son capaces de evitar el aumento de los niveles de azícar en sangre después de cada comida.