La alimentación es de gran importancia para mantener una salud física óptima. Y es que no hay una fuente más importante de vitaminas, minerales y otros nutrientes esenciales que lo que se consume. De ahí la importancia que se tengan hábitos saludables y un balance en todas las cosas.
“Llevar una dieta sana a lo largo de la vida ayuda a prevenir la malnutrición en todas sus formas, así como diferentes enfermedades no transmisibles y trastornos. Sin embargo, el aumento de la producción de alimentos procesados, la rápida urbanización y el cambio en los estilos de vida han dado lugar a un cambio en los hábitos alimentarios. Actualmente, las personas consumen más alimentos hipercalóricos, grasas, azúcares libres y sal/sodio; por otra parte, muchas personas no comen suficientes frutas, verduras y fibra dietética, como por ejemplo cereales integrales”, indica la Organización de la Salud.
No obstante, no solamente lo que se come es esencial, sino también lo que se toma. Es por esto que con algunas de las sustancias enlistadas anteriormente, así como con las plantas, se producen infusiones o tomas que ayudan a que se aprovechen mejor los efectos de los productos utilizados como bases.
“Los medicamentos derivados de las plantas ocupan un importante lugar tanto en la medicina tradicional como en la moderna. Por esa razón, un esfuerzo especial por conservar la gran diversidad de especies vegetales contribuiría indudablemente, a largo plazo, a mitigar el sufrimiento humano. Para ello es preciso aplicar tecnologías agroindustriales de eficacia probada al cultivo y elaboración de las plantas medicinales y a la fabricación de medicamentos herbarios”, agrega la OMS al respecto.
Un ejemplo de estas bebidas calientes hechas con plantas es aquella que incluye manzanilla, jengibre y canela.
Sus propiedades antioxidantes provoca el retraso de los efectos de la edad en las células, debido a que combate las acciones de los radicales libres, las cuales propician la aparición de manchas y arrugas en la piel, así como la oxidación celular y el desarrollo de algunas enfermedades crónicas.
Por otro lado, por tratarse de productos con alto contenido en aceites volátiles, tales como las sustancias fenólicas, las enzimas proteolíticas, el ácido linoleico, vitaminas y minerales, tiene la capacidad de ser el remedio casero ideal para favorecer el bienestar del cuerpo.
Asimismo, la mezcla entre manzanilla y jengibre hacen de esta infusión una sustancia con propiedades diuréticas ideales para combatir la retención de líquidos y el dolor abdominal. Ayuda a que se eliminen las toxinas del organismo y el exceso de líquido. Otorga una sensación de saciedad durante el ayuno.
Para prepararla solamente necesita hervir una taza de agua y agregar en ella una cucharada de manzanilla, otra de jengibre y una más de canela. Podría adicionar miel para endulzar y combinar todo hasta resultar en un elemento homogéneo.
Cabe mencionar que el jengibre también tiene grandes efectos sobre las fallas en la circulación.
De acuerdo con el Medical News Today, “tener mala circulación puede deberse a diabetes, enfermedades cardíacas, enfermedades que afectan arterias o venas u obesidad”. Además de un tratamiento recomendado por un especialista, el portal Mejor con Salud recomienda uno de los alimentos más eficaces para activar la circulación de forma natural.
Los análisis han demostrado que esta raíz aporta al buen funcionamiento del sistema circulatorio, previniendo la formación de várices o coágulos. Según con el portal citado, este alimento contiene un ácido natural llamado salicilato, que es un potente diluyente de la sangre.
Información del sitio web de estilo de vida unCOMO asegura que esta raíz “favorece de manera natural la circulación sanguínea, lo cual es ideal para disolver la fibrina (proteína que interviene en los mecanismos de coagulación) en los vasos sanguíneos y prevenir problemas circulatorios como las venas varicosas”.