Durante los meses invernales, cuando la necesidad de mantenerse hidratado puede no ser tan evidente como en otras estaciones, los tés y diversas infusiones representan una solución ideal. Este enfoque no solo permite cumplir con la hidratación necesaria, sino experimentar una amplia gama de sabores disponibles en el mundo de las infusiones.

Este abanico de opciones no solo satisface el gusto, sino que proporciona múltiples beneficios, entre ellos, la posibilidad de apoyar la pérdida de peso.

Este abanico de opciones no solo satisface el gusto, sino que proporciona múltiples beneficios, entre ellos, la posibilidad de apoyar la pérdida de peso. | Foto: Copyright Dazeley

Infusiones naturales que permiten equilibrar el metabolismo

Té verde

El té verde es una bebida conocida por sus propiedades adelgazantes y se destaca por su sabor amargo que a menudo resulta atractivo. A diferencia de otras opciones, el té verde ofrece beneficios notables.

Este tipo de té es especialmente efectivo en activar rápidamente el metabolismo. Además de su sabor característico, su composición es rica en antioxidantes, lo que contribuye significativamente a la reducción del tejido adiposo.

Estas cualidades hacen que, cuando se combina con una dieta balanceada y actividad física, el té verde se convierta en un complemento adicional para lograr una pérdida de peso saludable.

Té negro

Dentro del ámbito de los tés, el té negro es otro valioso aliado para impulsar el metabolismo. Aunque no es tan ampliamente conocido como otras variedades, el té negro ofrece beneficios significativos gracias a su contenido en teaflavinas. Estas sustancias tienen la capacidad de influir en la distribución y eliminación de grasas en el organismo.

Se ha observado de manera constante cómo personas con casos severos de obesidad han complementado sus tratamientos con una ingesta regular de té negro durante un período de dos o tres meses, obteniendo resultados notables y experimentando los beneficios que esta bebida puede aportar.

El té negro puede eliminar las grasas del organismo. | Foto: SasaJo

Mate

Una imagen estereotipada común de las personas en Argentina y Uruguay es su aparente adicción al mate. Sin embargo, esta bebida debería considerarse una valiosa adición a la dieta global debido a sus numerosos beneficios. En primer lugar, el mate es una hierba con propiedades diuréticas naturales que facilitan la eliminación de toxinas y promueven la hidratación.

Además, su contenido de mateina brinda una estabilidad energética que se mantiene a lo largo de varias horas, haciendo de esta bebida una alternativa saludable al café. Más aún, la capacidad del mate para activar el metabolismo facilita el proceso de pérdida de peso en conjunción con una dieta equilibrada.

Rooibos

Cuando se busca una infusión para perder peso sin experimentar nerviosismo, el rooibos se presenta como una opción altamente recomendable. Derivado de una planta diferente y exento de teína, contiene un componente con cualidades relajantes que promueve un descanso más efectivo. Además, el rooibos puede ser beneficioso para optimizar la digestión y acelerar el metabolismo. Su perfil de sabor, que amalgama toques dulces y matices amaderados, lo hace especialmente idóneo para consumir durante las jornadas frías.

Los rooibos pueden acelerar el metabolismo. | Foto: bukkerka/ Getty Images

Té Oolong

Este tipo de té es altamente apreciado y goza de gran popularidad en la actualidad, a menudo denominado como té azul debido a su tono distintivo al ser infusionado, que se encuentra a medio camino entre el té verde y el té negro. Sus componentes, que presentan similitudes con ambas variedades, lo convierten en una bebida sumamente adecuada para acelerar el metabolismo. Sin embargo, este té ofrece un valor añadido al promover la reducción del colesterol y facilitar el manejo de digestiones más pesadas.

Té blanco

En compañía del té verde, el té blanco se destaca como otra opción beneficiosa debido a su suave proceso de fermentación, que resulta en una alta concentración de antioxidantes. Estos antioxidantes tienen la capacidad de inhibir la formación de tejido adiposo, lo que significa que ayudan a eliminar y redistribuir las áreas con tejido adiposo y sebáceo. Este proceso favorece la eliminación de toxinas y también contribuye a una mayor eficiencia en la quema de calorías provenientes de los alimentos digeridos.