Padecer diabetes es complejo, dado que la alimentación debe ser mayoritariamente regularizada, debido a que es una patología que se origina porque el páncreas no sintetiza la cantidad de insulina que el cuerpo humano necesita y por ende, la elabora de una calidad inferior o no es capaz de utilizarla con eficacia.

Ante esta enfermedad, es importante conocer la importancia de la insulina, una hormona producida por el páncreas, que se encarga del mantenimiento de los valores adecuados de glucosa en sangre. También permite que la glucosa, es decir, el azúcar en sangre, entre en el organismo y sea transportada al interior de las células, en donde se transforma en energía para que funcionen los músculos y los tejidos. Del mismo modo, ayuda a que las células almacenen la glucosa hasta que su utilización sea necesaria.

Frente a las causas de la diabetes, Luis Ávila, vocal de la Junta Directiva de la SED, apunta al portal web Cuídate Plus, que “no se conoce la causa exacta de la diabetes, entre otras cosas porque hay muchos tipos diferentes”. De hecho, el momento de aparición de la enfermedad, las causas y los síntomas que presentan los pacientes dependen del tipo de diabetes:

  • Diabetes tipo 1: se presenta cuando hay una destrucción de las células que producen la insulina en el páncreas (las células beta) por autoanticuerpos. Esto quiere decir que el organismo ataca a sus propias células como si fueran extrañas (como ocurre en la enfermedad celíaca y en otras enfermedades autoinmunes).
La diabetes tipo 2 es la más común. | Foto: Getty Images
  • Diabetes gestacional: “durante el embarazo la insulina aumenta para incrementar las reservas de energía. A veces, este incremento no se produce, lo que puede originar una diabetes gestacional. Suele desaparecer tras el parto, pero estas mujeres tienen un alto riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 a lo largo de su vida”, indica el portal en mención.

Una forma saludable de prevenir este problema de salud es consumiendo una dieta rica en vitaminas y minerales, pero baja en grasas saturadas y azúcares. De hecho, la medicina tradicional ofrece una gran variedad de infusiones a base de plantas medicinales que son antioxidantes y que regulan los niveles de azúcar en la sangre.

Por lo anterior, el portal web El Clarín destaca las propiedades del té azul, una poderosa bebida que se hace a través de la fermentación de las flores secas de la planta Clitoria ternatea, que crece en países como India, Sri Lanka, Malasia, Birmania y Filipinas. Además, se destaca por sus propiedades antioxidantes, antivirales y antimicrobianas.

El té azul favorece la quema de grasa. | Foto: Eva Katalin Kondoros/Getty Images

“Con frecuencia, la infusión se acompaña de otros ingredientes como jengibre, canela, menta o limón. La inclusión de estos puede hacer que su color cambie un poco. Incluso sin ellos, y de acuerdo con el pH y la calidad de los pétalos utilizados, el tono final del té puede acercarse al violeta, el morado e incluso al rojo”, indica la revista Mejor con Salud.

Frente a sus beneficios, varios estudios advierten que esta poderosa infusión puede mejorar la glucosa postprandial y la producción y uso de insulina, clave en los casos de diabetes. Asimismo, es muy recomendada para subir los niveles de energía, disminuir la inflamación, proteger la salud intestinal, mejorar síntomas premenstruales, aumentar el foco y mejorar los estados de ánimo.

¿Cómo hacer esta poderosa infusión?

La revista Mejor con Salud da a conocer la preparación del té azul:

Ingredientes

  • ½ cucharadita de hojas secas de Clitoria ternatea (2,25 g).
  • ½ taza de agua (125 ml).
El té azul, una poderosa bebida que se hace a través de la fermentación de las flores secas de la planta 'Clitoria ternate'. | Foto: Getty Images

Preparación

  • Luego, agregar las hojas y dejar reposar entre tres y cuatro minutos.
  • Pasado ese tiempo, disfrutar del exquisito té azul.
  • Si así lo desea, puede añadir jengibre, limón o miel.