En la tarde de este lunes 15 de mayo se conoció que la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó una nueva directriz sobre el consumo de los edulcorantes no azucarados, como la sacarina o la estevia, en la que desaconseja su uso para controlar el peso corporal.

La recomendación se basa en los resultados de una revisión sistemática de la evidencia disponible sobre el uso de este tipo de productos, que sugiere que la ingesta de los edulcorantes no confiere ningún beneficio a largo plazo en la reducción de la grasa corporal ni en los adultos ni en los niños.

Tener un peso elevado puede desencadenar enfermedades coronarias. | Foto: Getty Images

Los resultados de la revisión de la OMS también sugieren, por el contrario, que puede haber posibles efectos indeseables del uso a largo plazo de estos productos, como un mayor riesgo de diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y mortalidad en adultos.

Todo lo que justamente los edulcorantes prometen combatir a través de intensas campañas de marketing y publicidad.

Edulcorantes no ayudan a controlar el peso

“La sustitución de azúcares libres por edulcorantes no azucarados no ayuda a controlar el peso a largo plazo. Las personas deben considerar otras formas de reducir la ingesta de azúcares libres, como consumir alimentos con azúcares naturales, como la fruta, o los alimentos y las bebidas no azucarados”, afirmó el director de Nutrición e Inocuidad de los Alimentos de la Organización Mundial de la Salud, Francesco Branca.

Los edulcorantes no azucarados no son factores dietéticos esenciales y no tienen valor nutricional | Foto: Dirk Richter

Asimismo, el experto asegura que no tienen valor nutricional. “Los edulcorantes no azucarados no son factores dietéticos esenciales y no tienen valor nutricional. Las personas deberían reducir totalmente el sabor dulce de la dieta, desde una edad temprana, para mejorar su salud”, indicó Branca.

La recomendación se aplica a todas las personas, excepto a las que padecen diabetes preexistente, e incluye todos los edulcorantes no nutritivos sintéticos y naturales o modificados que no están clasificados como azúcares y se encuentran en alimentos y bebidas, o que se venden solos para que los consumidores los añadan a sus alimentos y bebidas.

Edulcorantes no nutritivos para control de peso: sacarina o estevia

Ahora bien, la entidad señaló que entre los edulcorantes no nutritivos más comunes se encuentran el acesulfamo K, el aspartamo, el advantamo, los ciclamatos, el neotamo, la sacarina, la sucralosa, la estevia y los derivados de esta última, una de las más vendidas en el mundo.

La recomendación no se aplica a los productos de higiene y cuidado personal que contienen estos edulcorantes, como dentífricos, cremas para la piel y medicamentos, y tampoco los azúcares y alcoholes de azúcar (polioles) que son bajos en calorías. Y los que son azúcares o derivados del azúcar que contienen calorías y, por tanto, no se consideran edulcorantes no azucarados.

Los edulcorantes no azucarados no son factores dietéticos esenciales y no tienen valor nutricional.

Debido a que el vínculo observado en la evidencia entre los edulcorantes y los resultados de la enfermedad podría estar confundiendo a la comunidad por las características basales de los participantes en el estudio y los complicados patrones de uso de estas sustancias, la recomendación se ha evaluado como condicional, siguiendo los procesos de la OMS para el desarrollo de directrices.

Esto indica que las decisiones políticas basadas en esta recomendación pueden requerir un debate en contextos nacionales específicos, vinculados, por ejemplo, al alcance del consumo en diferentes grupos de edad.

La directriz de la Organización Mundial de la Salud sobre los edulcorantes no azucarados forma parte de un conjunto de directrices existentes y futuras sobre dietas saludables, cuyo objetivo es establecer hábitos alimentarios sanos para toda la vida, mejorar la calidad de la dieta y disminuir el riesgo de enfermedades no transmisibles en los habitantes de todo el mundo.

*Con información de Europa Press.