El café es una bebida predilecta alrededor del mundo y un artículo de Tua Saúde revisado por la nutricionista Tatiana Zanin asegura que sus propiedades ayudan a mejorar algunas funciones del organismo. Además, destaca que el café está compuesto de ácidos como el cafeico, el kahweol y el clorogénico, que tienen antioxidantes.

El Instituto Nacional del Cáncer (NCI) precisa que el antioxidante es una “sustancia que protege las células de los daños que causan los radicales libres”. Por tanto, la acumulación de estos últimos, “con el tiempo, es ampliamente responsable del proceso de envejecimiento”, asegura la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus).

De ahí que el café se puede encontrar y consumir en varias presentaciones, donde los granos pueden ser tostados o no, y/o molidos, entre otros. Además, su aroma y textura hacen de él un ingrediente protagonista de la gastronomía para la preparación de platos y postres. Además, la cafeína es su compuesto principal, que también se encuentra en otros alimentos.

Beneficios del café

El NCI describe la cafeína como aquella sustancia que se encuentra en las hojas del cafeto o las semillas. De igual manera, se hace presente en la yerba de mate y la guaraná.

Entre las principales funciones de la cafeína se encuentran el aumento de “la actividad del cerebro, el estado de alerta, la atención y la energía”. Por esto, el portal asegura que el consumo de café mejora la memoria y la concentración porque es un estimulante del sistema nervioso.

No obstante, un alto consumo puede ser perjudicial, porque incrementa la presión arterial y la frecuencia cardiaca. Por lo anterior, la Clínica Mayo sugiere un consumo máximo de cuatro tazas de café al día para no afectar la calidad del sueño y evitar complicaciones.

Hay que moderar el consumo de café, según expertos. | Foto: Getty Images

¿El café envejece?

Pero ¿se puede envejecer más rápidamente si se toma una taza de café a diario? De acuerdo con Todo para Ellas, esto sí puede ocurrir siempre y cuando se beba café de manera incorrecta, por ejemplo en ayunas o como efecto de un consumo excesivo.

Por ejemplo, la ingesta solamente de café en ayunas se ha vuelto común para muchas personas que, sin considerarlo, podría ser perjudicial para la salud; de acuerdo con Mundo Deportivo, al estar compuesto de ácido clorogénico, provoca inflamación en la estructura del estómago, afectando el sistema digestivo, que ocasiona náuseas y ardores.

Las arrugas suelen asociarse con los signos de la edad. | Foto: Getty Images

Expresa que quienes la consumen como bebida matutina sin consumir nada sólido podrían afectar la disminución de producción de cortisol, que tal y como lo define el NCI es una “hormona elaborada por la corteza suprarrenal”, que “ayuda al cuerpo a usar la glucosa (un azúcar), la proteína y las grasas”, además de “poner alerta el cuerpo”.

Por su parte, la Clínica Mayo la define como la hormona del estrés, que, aunque “mejora el uso de glucosa en el cerebro y aumenta la disponibilidad de sustancias que reparan los tejidos”, cuando se toma café en ayunas, la piel se encuentra estresada y permite su envejecimiento prematuro. Incluso señala que propicia la aparición de acné e inflamación de la piel.

El café y su efecto en la presión arterial. | Foto: Getty Images

También manifiesta que el no consumo correcto de esta bebida afecta la producción de colágeno, una proteína que según Mundo Deportivo le da elasticidad y firmeza a la piel, que cuando disminuye en el organismo suelen pronunciarse las líneas de expresión y las arrugas, como signos de la edad.

Finalmente, señala que el consumo no moderado de café reseca la piel, gracias a su comportamiento vasoconstrictor, que según MedlinePlus, es el estrechamiento de los vasos sanguíneos.