Los antioxidantes son compuestos químicos que interactúan con los radicales libres y los neutralizan, lo que les impide causar daño, de acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer.

Además, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explicó que los antioxidantes se encuentran en muchos alimentos, incluyendo frutas y verduras. También se encuentran disponibles como suplementos dietéticos.

Así las cosas, algunos ejemplos de antioxidantes incluyen:

  • Beta carotenos.
  • Luteína.
  • Licopeno.
  • Selenio.
  • Vitamina A.
  • Vitamina C.

Sobre la misma línea, el centro tecnológico Ainia citó que ”la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) analizó y aprobó el uso del extracto de romero como antioxidante”.

Adicional, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que “el romero es rico en ácidos antioxidantes como ácido rosmarínico, ácido carnósico, ácido ferúlico y taninos que ayudan a mejorar el sistema inmunológico, prevenir infecciones y mejorar la salud de la piel”.

Además añadió que “adicional de esto, los antioxidantes evitan la formación de radicales libres que dañan las células, por lo que esta planta puede tener un gran potencial como un remedio antitumoral, previniendo las alteraciones en las células”.

Asimismo, indicó que los principales beneficios del uso del romero son:

1. Mejorar el sistema nervioso.

2. Actuar sobre la digestión.

3. Proteger al hígado.

4. Aliviar el estrés y la ansiedad.

5. Mejorar el dolor y la circulación.

6. Descongestionante.

De todos modos, de acuerdo con MedlinePlus, web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, las hierbas medicinales (o remedios herbales) son plantas usadas como medicamento y las personas las usan para ayudar a prevenir, curar una enfermedad, para aliviar síntomas, incrementar la energía, relajarse o perder peso. Sin embargo, las hierbas no son reguladas ni probadas como los medicamentos.

Es por ello que muchas personas creen que utilizar plantas para tratar una enfermedad es más seguro que tomar un medicamento, ya que las personas han estado usando plantas en medicina popular durante cientos de años y por ello, es fácil ver el atractivo. No obstante, “natural” no quiere decir seguro a menos que se tomen de la manera indicada, pues algunas hierbas pueden interactuar con otros medicamentos o ser tóxicas en dosis altas. También pueden causar efectos secundarios.

Es por ello que muchas personas creen que utilizar plantas para tratar una enfermedad es más seguro que tomar un medicamento, ya que las personas han estado usando plantas en medicina popular durante cientos de años y por ello, es fácil ver el atractivo. No obstante, “natural” no quiere decir seguro a menos que se tomen de la manera indicada, pues algunas hierbas pueden interactuar con otros medicamentos o ser tóxicas en dosis altas. También pueden causar efectos secundarios.

¿Cómo preparar el té de romero?

Ingredientes:

  • 5 g de hojas frescas de romero
  • 250 ml de agua hirviendo

Preparación:

  • En una olla, añadir la cantidad señalada de agua y dejar que hierva.
  • Luego, en un vaso agregar las hojas frescas de romero y después echar el agua hirviendo. Para que infusione correctamente, se debe dejar reposar entre tres a cinco minutos, cubierto con un plato o una tapa.
  • Para servir, se aconseja colar esta bebida y esperar a que enfríe un poco antes de tomarla. Asimismo, se recomienda no endulzar este té.

Adicional, hay que tener en cuenta que este té puede tomarse entre tres y cuatro veces al día. Sin embargo, antes de consumir la bebida lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.