Cuando aparece el dolor de estómago, las náuseas, la diarrea o la falta de apetito, puede ser un problema de parásitos intestinales que se debe tratar rápidamente. De acuerdo con MedlinePlus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, un parásito intestinal es un organismo que vive dentro de otro organismo y se alimenta del lugar en el que es huésped.
Normalmente, estos se pueden encontrar en algunos alimentos: en el agua contaminada, en la picadura de un insecto e incluso en el contacto sexual. De esta manera, los parásitos se suelen reproducir en el intestino y en los demás organismos en los que habiten. Una de las principales causas por la que aparecen estos microorganismos son por las condiciones sanitarias deficientes.
Para eliminar estos parásitos del organismo, existen distintos remedios naturales que funcionan como purgantes. De hecho, la revista Mejor con Salud destaca las propiedades del helenio, una planta nativa de Europa que se caracteriza por su rigidez, flores amarillas de pétalos largos y raíz gruesa y bifurcada. Como tal, “la raíz y los rizomas suelen ser empleados por la medicina tradicional china y la herbología, por lo que se pueden encontrar en tés, tinturas, jarabes, extractos y dulces. Te mostramos todo lo que debes saber”.
Respecto a los parásitos intestinales, las propiedades antimicrobianas, antiinflamatorias, carminativas y antiespasmódicas de esta planta medicinal, ayuda a disminuir las náuseas, las flatulencias y la diarrea que son síntomas ocasionados por los parásitos.
“Su contenido en alantolactona e isoalantolactona también está asociado a la muerte de parásitos intestinales y tricocéfalos, causantes de un número importante de malestares digestivos”, indica Mejor con Salud.
¿Cómo consumir esta planta medicinal?
De acuerdo con información de la revista en mención, la raíz de helenio se puede encontrar en distintas presentaciones como polvo seco, extracto líquido, té a granel y trozos de raíz secos. Respecto a sus dosis, estas pueden variar y no hay evidencia suficiente para establecer la más adecuada, por lo que su consumo debe ser consultado con un especialista en salud.
Otros beneficios del helenio
- Mejorar la salud respiratoria: esta planta medicinal se caracteriza por su capacidad para reducir la tos y aliviar enfermedades respiratorias como la rinitis, la bronquitis y las infecciones de garganta. De hecho, un estudio publicado en Respiratory Research, indica que la alantolactona contenida en el helenio es capaz de inhibir la inflamación causada por el contacto con el humo del cigarrillo.
- Tiene propiedades anticancerígenas: existe evidencia científica que relaciona los compuestos químicos del helenio con una disminución de la actividad cancerígena. Frente a esto, un estudio en probeta demostró que el extracto de helenio resulta tóxico para algunas células cancerosas y cuenta con potencial antitumoral.
- Combate las bacterias: el extracto de helenio tiene compuestos activos que combaten la bacteria Staphylococcus. Otro estudio publicado en European Journal of Clinical Microbiology & Infectious Diseases reveló que la raíz fue eficaz contra esta bacteria. Del mismo modo, una investigación publicada en Planta Médica encontró que el extracto de helenio puede contener a la bacteria Mycobacterium tuberculosis, causante de la tuberculosis.
¿Cómo prevenir este tipo de infecciones?
‘MedlinePlus’ sugiere adoptar algunos hábitos básicos para prevenir el desarrollo de parásitos intestinales. Seguirlos al pie de la letra disminuye el riesgo de adquirir este tipo de infecciones que, en casos graves, pueden conducir a afecciones serias de salud.
Los expertos en salud recomiendan:
- Bañarse tan pronto la persona se levanta.
- Lavar frecuentemente pijamas y sábanas.
- Lavar las manos con frecuencia, sobre todo después de usar el escusado o de cambiar pañales.
- Cambiar la ropa interior todos los días.
- Evitar morderse las uñas.
- Evitar rascarse la zona anal.
Se trata de prácticas simples, pero a menudo olvidadas por las personas en su cotidianidad. No obstante, acogerlas dentro de la rutina contribuye a prevenir la aparición y posterior desarrollo de invitados no deseados en los intestinos.
La información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y, por ello, lo primero que se debe hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.