La gerascofobia es el temor que muchas personas sufren a envejecer. Esta condición tiene un componente irracional que hace obsesionarse por lo inevitable: el transcurso vertiginoso de los años.
“La vejez es el resultado de la acumulación de una variedad de daños moleculares y celulares a lo largo del tiempo, lo que lleva a un descenso gradual de las capacidades físicas y mentales, a un mayor riesgo de enfermedades y, en última instancia, a la muerte”, enfatizó la Organización Mundial de la Salud.
Pese a que es un proceso natural y biológico del que ninguno se puede escapar, los profesionales de la salud recomiendan algunas plantas para retrasar los efectos del envejecimiento, entre los que se destaca la ashibata.
Esta hierba medicinal japonesa es conocida como la planta de la eterna juventud por sus diferentes cualidades y propiedades. Pues tiene capacidades regenerativas que pueden apoyar al tratamiento de numerosas enfermedades.
“La ashibata tiene capacidades regenerativas, debido a la presencia de compuestos potentes como la clorofila, quercetina, luteína, cumarinas, flavonas y chalconas. También posee una sustancia natural conocida como 4,4′-dimetoxichalcona (DMC), capaz de eliminar la basura celular que se acumula en las células que envejecen y causan enfermedades”, indicó el portal Cocina Fácil.
Luego, precisó; “Estudios demuestran que la ashibata puede llegar a proteger las células hepáticas, prevenir el crecimiento de tumores y la metástasis. Esta planta medicinal puede matar diversas bacterias dañinas”.
La página especializada señaló finalmente que otro de los beneficios que tiene esta hierba es que ayuda a bajar de peso y reduce la circunferencia de la cintura.
¿Cómo prevenir el envejecimiento prematuro?
- Actividad física: realizar ejercicio moderado de 30 a 45 minutos al día es una rutina fundamental, ya que acciona y acelera el metabolismo.
- Alimentación sana y equilibrada: el cuerpo requiere de una nutrición indicada para gozar de buena salud y evitar la oxidación causada por los radicales libres del ambiente.
- Dormir bien: el sueño es una de las mejores terapias antienvejecimiento. La piel y el sistema nervioso están estrechamente relacionados, siendo el reflejo del estado físico, psicológico y mental. Por tanto, dormir bien por la noche se refleja positivamente al disminuir el estrés, la angustia o el cansancio. El sueño es un proceso constructivo que reajusta el sistema biológico con funciones regeneradoras y estabilizadoras.
¿Qué recomiendan los expertos para tratar la gerascofobia?
- Aceptar con naturalidad los signos del paso de los años y entender que los cambios físicos, psicológicos y vitales se producen de forma gradual. Es importante cuidarse por dentro y por fuera en cualquier etapa de la vida, sin llegar a que se convierta en una obsesión.
- Realizar un trabajo de introspección para reconocer las cualidades que se poseen como persona. También se recomienda hacer un balance de las experiencias vividas y todo lo que nos ha enseñado cada etapa.
- Focalizarse y disfrutar del momento y de los planes a futuro. Cada año que pasa, la persona ha vivido experiencias que le han permitido crecer a nivel personal, ahora es el momento de disfrutar de su vida actual, valorar todo lo que se tiene al alrededor y planificar con ilusión todo lo que se quiere hacer.