Los niveles altos de glucosa en la sangre (hiperglucemia) pueden ser un signo de diabetes, una enfermedad crónica (de larga duración) que afecta la forma en que el cuerpo convierte los alimentos en energía, de acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EE. UU. (CDC, por sus siglas en inglés).

Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reveló que con el tiempo, la diabetes puede dañar el corazón, los vasos sanguíneos, los ojos, los riñones y los nervios. Adicional:

  • Los adultos con diabetes tienen un riesgo entre dos y tres veces mayor de sufrir un infarto de miocardio o un accidente cerebrovascular.
  • Las neuropatías (lesiones del tejido nervioso) de origen diabético que afectan a los pies, combinadas con la reducción del flujo sanguíneo, elevan la probabilidad de sufrir úlceras e infecciones que, en última instancia, requieran la amputación de la extremidad.
  • La retinopatía diabética, que es una importante causa de ceguera, es una consecuencia del daño de los capilares de la retina acumulado a lo largo del tiempo. Cerca de un millón de personas se han quedado ciegas debido a la diabetes.

Por ello, el portal de salud Healthline reveló que el ajo es una hierba con grandes beneficios y uno de ellos es que ayuda a reducir los niveles de glucosa, ya que la revista médica Diabetes, Metabolic Syndrome and Obesity publicó un estudio en el cual se determinó que los pacientes diabéticos que consumían ajo en ayunas para complementar su respectivo tratamiento mostraron una reducción considerable de sus niveles de glucosa.

Adicional, la revista médica Journal of Medicinal Food publicó una investigación en la que se evidencia que el ajo puede combatir los procesos de inflamación

Sin embargo, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, es importante reducir la ingesta de ajo en personas con problemas estomacales o digestivos, ya que podría llegar a producir irritación del tracto gastrointestinal.

Además, Medline Plus también advierte que el ajo, especialmente fresco, podría aumentar el sangrado. Por ello, recomiendan dejar de tomarlo al menos dos semanas antes de un procedimiento quirúrgico. Asimismo, los pacientes sometidos a tratamiento anticoagulante deben vigilar su consumo, pues puede elevar el riesgo de sangrado.

Por su parte, la OMS reveló en su portal web que está demostrado que hay medidas simples relacionadas con el modo de vida que resultan eficaces para prevenir o retrasar la aparición de la diabetes como, por ejemplo:

1. Conseguir un peso corporal saludable y mantenerse en él y para saber si una persona está en un peso saludable, existen algunos métodos confiables. Uno es la determinación del Índice de masa corporal (IMC), que describe la relación entre peso y estatura y para calcular el IMC se necesita conocer el peso y la estatura y se aplica una sencilla fórmula matemática que consiste en dividir el peso entre la estatura al cuadrado: IMC = Peso (Kg) / Estatura al cuadrado (Mt).

Ejemplo:

Una persona pesa 64 Kg y mide 1.5 metros: 64 / 1.5 x 1.5 = 28.44. Este dato indica que el IMC de la persona (28.44) se encuentra en los valores correspondientes a sobrepeso.

Esta fórmula no aplica a mujeres en estado de embarazo y debe ser ajustada si la persona tiene algún grado de edema (retención de líquido).

2. Realizar al menos 30 minutos de ejercicio físico de intensidad moderada la mayoría de los días, aunque quizá se requiera más ejercicio para controlar el peso.

3. Seguir un régimen alimentario saludable, sin azúcar ni grasas saturadas y tener en cuenta que algunos alimentos que suben la insulina en la sangre son: chocolates, caramelos, mermeladas, miel, helados, gaseosas, alcohol, galletas dulces, comida rápida, harina de trigo refinada, cereales azucarados, entre otros.

4. No consumir tabaco, pues fumar eleva el riesgo de sufrir diabetes y enfermedades cardiovasculares.