Conforme pasan los años, llegan nuevas preocupaciones, como las arrugas y la manera de prevenirlas. Y aunque en el mercado hay una amplia gama de productos para hacer ver a las personas más jóvenes, una opción para ayudar al bolsillo siempre será optar por remedios naturales.
Para las arrugas de los ojos, una planta recomendada incluso por dermatólogos, es la aloe vera o la sábila, como se le conoce comúnmente. ¿Por qué? Porque tiene la capacidad de activar los fibroblastos, es decir, las células encargadas de producir colágeno, como lo dejan en evidencia algunas investigaciones, una de ellas la Universidad Nacional de México.
Además de facilitar la producción de colágeno, necesario para que la piel permanezca tersa, la sábila aporta aminoácidos esenciales para el organismo humano, como el triptófano, utilizado por el cuerpo para secretar hormonas como la melatonina, clave para tener calidad de sueño.
En ese contexto, portales como Panorama.com establecen fórmulas para utilizar la sábila para tratamientos de la piel, pero no solo para tratar las arrugas cerca de los ojos, algunas de ellas conocidas como “arrugas del sueño”, sino para combatir las manchas producto del sol y tratar afecciones como el acné.
A continuación, algunas de ellas:
Agua de aloe vera
Una recomendación para usar aloe vera es dejar una hoja en agua durante toda la noche para aplicarla sobre las arrugas al día siguiente. Sirve, en especial, para desinflamar la piel gracias al colágeno y también ayuda a quitar manchas. La idea es utilizarla luego de haber lavado la cara.
Aloe vera congelado
Aunque no se crea, el aloe vera también tiene un efecto bótox, es decir, ayuda a que los músculos no se contraigan. ¿Cómo? Congelando el gel de la sábila en un molde para hielo y dejándolo en el congelador. La idea es usarlo para hacer masajes en el rostro.
Cada noche, como un gel
Entre las sugerencias para usar el aloe vera sobresale aplicarlo sobre la piel durante las noches y retirarlo una vez amanezca con agua fría.
La posición al dormir que propicia la aparición de arrugas
Aunque no existen pócimas para dejar de envejecer, hay hábitos con los que es posible verse más joven, entre ellos dormir bien. Acostarse en la posición correcta cada noche puede ayudar a quitarse unos años de encima o, al menos, a evitar más arrugas de las que corresponden a la edad.
Hay algo conocido como las arrugas del sueño, es decir, aquellas que aparecen por la manera en que las personas duermen.
Lo que sucede es lo siguiente: dormir mucho tiempo hacia un mismo lado o boca abajo, obstruye los folículos de la piel, lo que se puede traducir en la retención de líquidos en algunas zonas.
Además, se producen “porque el aporte de oxígeno que llega a esa zona de la piel es menor debido a la fricción y comprensión del rostro, que tanto perjudica la microcirculación”, según el centro de belleza Carmen Navarro en España, con más de cuatro décadas de experiencia en medicina estética.
Si al dormir durante mucho tiempo en una posición se le añade la pérdida de colágeno o ácido hialurónico —algo normal con el paso de la edad— lo más seguro es que salgan más arrugas del sueño que las naturales.
Entre las recomendaciones en el momento de dormir para evitar arrugas prematuras en el rostro y mejorar la calidad de vida, destacan: dormir boca arriba y elegir una buena almohada.
Dormir boca arriba no solo es beneficioso para el cuidado de la piel, sino que también ayuda a mejorar la respiración y a reducir el padecimiento de migrañas y dolores de espalda, pues lo obliga a mantener la columna recta.
Para tener un sueño placentero, pero que también evitar la aparición de arrugas, es necesario escoger una buena almohada, preferiblemente cuya funda sea en materiales como seda, dado que se adhieren menos al rostro. Para quienes sufren de irritación, lo recomendado son los cojines hipoalergénicos.