El melón es una fruta cuyo contenido de agua es muy alto. Según informa la Fundación Española para la Nutrición, tan solo una porción de 100 gramos de este alimento puede contener más de un 90 % de agua, de ahí que aporte una sensación hidratante
El melón también es una fuente principal de vitamina C, aportando hasta el 75 % de la cantidad sugerida al día. También es una fruta rica en potasio, nutriente fundamental para la estructura muscular, la salud ósea y el sistema nervioso.
Más allá de esas propiedades del melón, el Diario Córdoba, en su sección de Salud, resalta otros beneficios que traería el consumo regular de esta deliciosa fruta.
El portal concluye que gracias a esa gran cantidad de agua que posee el melón se ayudaría a “bajar la presión arterial y es muy recomendable incorporarlo a la dieta si adolecemos de hipertensión”.
Más beneficios del melón
Consumir melón fruta también genera un estimulo para el proceso de desintoxicación del organismo, lo que se traduce a su vez en la protección de la piel frente a la aparición de manchas asociadas a sustancias nocivas, tal como lo menciona la revista The Gourmet Journal.
Al propiciar la eliminación de líquidos del cuerpo, contribuye a su vez al mantenimiento de la salud de los riñones.
Adicionalmente, al melón se le confieren propiedades para el mantenimiento de la estructura ósea, debido a que contiene ácido fólico, según indica un artículo de El Universal, un compuesto que interviene en la formación y el crecimiento del ser humano.
El melón también está considerado como un alimento que no contiene colesterol y se incluye entre las frutas más ligeras que existen, pues apenas 100 gramos de su pulpa suponen solo la ingesta de 30 kilocalorías.
El estreñimiento será cosa del pasado si se consume de manera regular melón. Ingerirlo y tenerlo dentro de la dieta puede mejorar el tránsito intestinal, ya que contiene fibras que ayudan a facilitar la evacuación de las heces y a reducir las molestias que la persona siente en su estómago.
Además, como es rico en agua, ayuda en la prevención del estreñimiento, manteniendo las heces hidratadas, promoviendo la regularidad del intestino y fortaleciendo su salud.
El melón también contiene carotenoides, los cuales actúan previniendo enfermedades cardíacas y además la adenosina y el licopeno que se encuentran dentro de este alimento parecen estar relacionados con un descenso de los infartos, según argumenta el portal Psicología y Mente.
La visión también se vería beneficiada con el consumo de melón. La presencia de carotenoides como el beta-caroteno, son útiles para mejorar la visión, igual que lo hace la patilla o la zanahoria.
En concreto, dicho beta-caroteno se convierte en vitamina A, la cual el cuerpo utiliza para reparar el funcionamiento ocular y para desarrollar el pigmento en la retina, lo que, además, influye positivamente en la visión nocturna.
Con el consumo de melón, la piel se verá más radiante ya que las semillas de esta fruta se pueden usar en forma de aceite, ya que contienen omega-6, sustancia que promueve la conservación y la renovación de la piel.