Al igual que otros aspectos físicos, la sonrisa es una de las mejores cartas de presentación, motivo por el que una persona con caries, ausencia de algunos de sus dientes, mal aliento o que simplemente luzca una dentadura amarilla, tal vez no cause la mejor impresión cuando llegue a algún lugar.
Por ello, es muy importante cuidar la salud bucal y, con esto, proteger al organismo de otras afecciones que pueden iniciar con problemas en la boca.
Así mismo, existen dientes sensibles resultado del desgaste del esmalte dental o de la exposición de las raíces de los dientes, según el doctor de Mayo Clinic, Thomas J. Salinas.
Sin embargo, también explicó que algunas veces el malestar dental es causado por otros factores, como una caries, un diente agrietado o astillado, un empaste desgastado o una enfermedad de las encías.
Uno de los síntomas de la sensibilidad dental es el dolor o estremecimiento cuando se consume algo frío, este efecto se produce, según el portal Odontologos.mx, por “las células dentales llamadas odontoblastos que contienen proteínas sensibles al frío que detectan los descensos de temperatura”.
Esto se pudo comprobar gracias a que las señales de estas células, publicadas en la revista Science Advances, pueden desencadenar una sacudida de dolor en el cerebro.
Los estudios de esta investigación fueron realizados, inicialmente en ratones, y se pudo encontrar que un canal iónico llamado TRPC5 (perteneciente a los odontoblastos), era muy sensible al frío, por lo que se estimó que el contacto con elementos helados desencadenaba una actividad nerviosa que indicaba que el diente percibía el frío.
Aunque los análisis no han sido completamente probados, dicho canal se encuentra, sobre todo, en los dientes con caries. Por ello, es importante llevar una correcta salud oral.
Según explica Mayo Clinic, una entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, al igual que otras áreas del cuerpo, la boca está llena de bacterias, en su mayoría inofensivas; sin embargo, teniendo en cuenta que la boca es el punto de entrada a las vías digestivas y respiratorias, algunas de estas bacterias pueden causar enfermedades.
Es así que no llevar una higiene bucal adecuada puede llevar a que las bacterias alcancen niveles que produzcan infecciones bucales, como caries y enfermedades de las encías.
Bajo ese contexto, entre las recomendaciones que hacen los expertos para proteger la salud bucal, además de cepillarse los dientes al menos dos veces al día con un cepillo de cerdas suaves y usando pasta dental con flúor, también es importante usar hilo dental todos los días, así como enjuague bucal, el cual ayuda a eliminar las partículas de comida que quedan después de cepillarse los dientes.
Sumado a esto, la entidad experta recomienda reemplazar el cepillo de dientes cada tres meses o antes si las cerdas están abiertas o gastadas, programar chequeos y limpiezas dentales regulares, evitar el consumo de tabaco y seguir una dieta saludable limitando los alimentos con azúcar agregada.
También, es importante visitar al dentista tan pronto se note alguna irregularidad y tratar a tiempo cualquier problema en la salud bucal que pueda llevar a dificultades más serias, entre ellas, padecer de endocarditis, una infección del revestimiento interno de las cámaras o válvulas cardiacas (endocardio) que por lo general ocurre cuando las bacterias u otros gérmenes de otra parte del cuerpo, como la boca, se propagan a través del torrente sanguíneo y se adhieren a ciertas zonas del corazón, explica Mayo Clinic.