Debido a que la sangre humana es un tejido líquido esencial que a la fecha no puede fabricarse de manera artificial, la ciencia ha venido trabajado en un mecanismo para revertir su incompatibilidad. Recientemente, gracias al descubrimiento de la herramienta de edición del genoma, conocida como CRISPR, los médicos comprobaron que es posible remover a voluntad las moléculas responsables de generar la incompatibilidad.Aunque en Colombia y el mundo la técnica aún es experimental, de lograrse tendría efectos revolucionarios. Entre ellas, que la captación de sangre no se vea afectada por falta de algún grupo sanguíneo específico o la disponibilidad de estos en los bancos de sangre, y la eliminación de propagación de enfermedades a través de las transfusiones.También puede leer: Donar sangre, un hábito salvavidasDe acuerdo con la Organización Mundial de Salud (OMS), cada año se recogen en el mundo alrededor de 111,5 millones de unidades de sangre. De ese total, 47 por ciento proviene de países con ingresos altos -donde vive el 19 por ciento de la población del planeta-; 64 por ciento de los países de ingresos medios y 41 por ciento de los países de ingresos bajos.España, por ejemplo, tiene un promedio de 36 donantes por millón de habitantes y desde hace más de 20 años se mantiene como uno de los líderes imbatibles en la donación de sangre. Sin embargo, como lo demuestran las cifras, no todos los países corren la misma suerte. Mientras que en naciones como Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Francia, Alemania, entre otros, más de 7 de cada 10 donantes son repetitivos. En Colombia esta relación es inversa. El problema, según Acobasmet, radica en que los donantes primerizos, comparados con los repetitivos, tienen más probabilidades de presentar eventos adversos,  como la transfusión de nuevas enfermedades.SEMANA habló con Michel García, presidente de la Asociación Colombiana de Bancos de Sangre, sobre el impacto que tendría el avance en la ciudadanía y la medicina mundial.SEMANA: ¿Cómo funciona la herramienta CRISPR y qué utilidades tiene?M.G.: Cuando esta técnica se descubrió en Japón en 1987 no se sabía muy bien qué utilidad tenía. Sin embargo, entre 2005 y 2007 varios grupos de investigación en distintas partes del mundo, como España y Holanda, se dieron cuenta de que el ADN de las bacterias tenía una repetición de secuencias que resultaba útil a las bacterias para protegerse de los virus. Una vez entendido cómo las bacterias se defendían de los virus, se exploró la posibilidad de identificar estos segmentos de ADN y transpolarlos a cultivos humanos. Allí fue cuando los científicos se dieron cuenta de que problemas del día a día, como el herpes o la culebrilla -que no tienen cura sino que se manejan tópicamente- se podrían solucionar con este sistema CRISPR.Le sugerimos: Colombia crece en donación de órganosSEMANA: ¿Cómo funciona el proceso mediante el que el CRISPR permitiría que la sangre de todos los humanos fuera compatible?M.G.: Esta es una de las múltiples aplicaciones que ya existen para este sistema de edición de genoma. Todas las células de nosotros tienen su información base en el DNA y eso es lo que determina la construcción de estructuras más complejas. Lo que sucede ahora con el CRISPR es que se pueden adicionar, suprimir o incorporar elementos que antes no estaban presentes y con eso solucionar ciertos problemas.  Particularmente lo que involucra a la Asociación de Medicina de Sangre y Medicina transfusional es la necesidad de siempre otorgar a los donantes una sangre lo más segura posible. Con respecto a la sangre, hay muchos problemas que resolver y uno de ellos es la falta de sangre compatible. Existen diversas razones por las cuales la sangre no puede ser compatible, pero una de las más problemáticas es el sistema de grupos sanguíneos. Hay 36 grupos, pero generalmente nuestra cédulas identifica muy pocos. Estos son: A, B, AB, O. o si es positivo a negativo. Esos dos sistemas pueden ser lo suficientemente complicados porque la administración de una pequeña muestra de sangre en la persona equivocada puede ocasionar la muerte. Entonces, esta técnica nos permitiría mediante una serie de modificaciones de las células de las personas lograr que todas al final sean compatibles. SEMANA: ¿Qué ocurre cuando hay una incompatibilidad dentro del organismo?M.G.: Lo que sucede es que cada tipo de sangre está acostumbrado a reconocer a ciertos tipos de agentes. Cuando llega uno distinto, rápidamente el cuerpo lo identifica como algo que no pertenece. Cuando se da esa incompatibilidad las personas reaccionan de manera muy agresiva y en cuestión de segundos un paciente puede desarrollar manifestaciones clínicas severas que le ocasionen la muerte. Según el Instituto Nacional de Salud, que lleva los registros de los 82 bancos de sangre que hay disponibles en el país y los 583 servicios que transfunden a pacientes, clínicas y hospitales, anualmente, los datos de 2016 indican que hubo tres casos de muerte por consecuencias de sangre. Por fortuna, esos tres casos no fueron por incompatibilidad A, B, O y RH, sino por otras causas. Esto demuestra su complejidad. SEMANA: ¿Qué tan avanzada está la técnica y cuál es el caso de Colombia?M.G.: La técnica todavía tiene aspectos que solventar a nivel internacional. Los únicos países, hasta donde tenemos información, que ya han empezado con ensayos clínicos se encuentran en Estados Unidos aprobados por la FDA; en Francia y en Japón. En el caso de Colombia, lo que nos interesa a nosotros es corregir una enfermedad que requiere con cierta frecuencia la administración de transfusiones, como la anemia de células falciformes. Mediante la técnica de la edición de genes CRISPR ya se ha logrado modificar este aspecto que las personas tienen de base heredada de sus padres. Ese pequeño error se puede corregir y según los reportes, a estas personas les ha ido bastante bien. La necesidad de transfusión se ha disminuido muchísimo y parece que necesitamos más tiempo, pero seguramente va a funcionar con éxito en Colombia.Le puede interesar: “Crispr será la solución a muchas enfermedades”SEMANA: ¿Cuáles son los riesgos de esta técnica, qué les falta desarrollar? M.G.: La ventaja de la técnica CRISPR es que se puede agregar o quitar selectivamente el componente que no se necesite de un gen particular. Un gen es como el ladrillo que permite construir una casa y se necesita de muchos para construir una edificación. Mediante CRISPR uno puede seleccionar cualquier ladrillo de los 100 o 500 para que la estructura quede lo mejor posible. Hay múltiples aplicaciones para ello, pero en este caso particular, lograr la modificación para que toda la sangre de todas las personas sea 100 por ciento compatible requiere su tiempo. Cuando se habla de edición de genes hay muchas cosas que podríamos predecir, pero es difícil tener la certeza de que tenemos garantía de que no va a ocurrir nada extraño. De hecho, cuando sale un medicamento antigripal o un antibiótico, el mecanismo es que se desarrolla la molécula en el laboratorio, se suministra esa molécula en líneas celulares y después se hace en animales, en humanos voluntarios y después sí se da una notificación de seguridad para que se pueda masivamente implementar. De nuevo, no podría decir con certeza cuáles son los riesgos por completo, siempre existirán, pero creo que son más las posibilidades que los posibles aspectos adversos. SEMANA: ¿Esta técnica también permitiría hacer compatibles órganos de animales y humanos? ¿Qué opina de eso?M.G.: Esta técnica de edición de genes permite solventar esas incompatibilidades y buscar en otras especies los órganos que entre humanos no podemos brindar. Los cerdos, por ejemplo, tienen muchas características similares a los humanos, una de ellos el corazón. El problema es que suelen estar infectados por unos virus particulares y cuando se trasplanta puede causar una reacción agresiva por parte del sistema inmune del humano que produce rechazo. Sin embargo, la técnica CRISPR ha demostrado de forma reiterativa y concluyente que se puede remover esa infección viral en los cerdos y de esta manera sugerir que ese corazón se pueda colocar en el humano y con ellos tener más disponibilidad de órganos. SEMANA: ¿Cuáles son los principales problemas que presenta la donación de sangre en Colombia?M.G.: Enfermedades como la hepatitis B o VIH se pueden transmitir por la sangre. Para ser concretos, hay aproximadamente 1.400 organismos que pueden atacar a los humanos y de esos 68 se pueden transmitir por la sangre. En los bancos apenas podemos buscar activamente 6 de ellos, lo que significa menos del 10 por ciento.  Pero si no los buscamos la posibilidad de que estén y pasen y provoquen enfermedades en las personas que requieren sangre, es muy alta. Resulta muy costoso, en términos de personas y tiempo, ponerse a buscar cada una de estas 68 entidades en la sangre. Hay otras técnicas internacionales como la aplicación de rayos ultravioleta  que son capaces de evitar la transmisión de hepatitis, VIH, sífilis y otras enfermedades y estamos buscando aplicarlas. SEMANA: ¿Por qué a la gente le da miedo donar sangre?M.G.: No lo llamaría miedo, en realidad es que en vacaciones hay déficit, no hay suficientes donantes para garantizar sangre a quienes la necesiten. Pero la sangre tiene una ventaja particular y es que se puede almacenar hasta 42 días. El Instituto Nacional de Salud desarrolló en 2017 un sistema que permite monitorizar en tiempo real la disponibilidad de sangre en todos los departamentos. El sistema conecta a los 82 bancos de sangre con 582 servicios de transfusión. A raíz de eso, puedo decir con un nivel de certeza muy alto que la satisfacción a la demanda de glóbulos rojos está cercana al 97 por ciento. Esto es casi cercano a la perfección. Estos problemas de la falta de disponibilidad son cíclicos y no ocurren en todos los tiempos. SEMANA: ¿Hay algunos tipos de sangre que son más comunes, escasos en Colombia? M.G.: El sistema de grupos sanguíneos A, B, O tiene cuatro posibles grupos. Las personas que son A representan cerca de 6 de cada 10 colombianos; las personas O, 6 de cada 10; y las personas que son B o AB son en realidad las más escasas.