Los riñones cumplen una de tantas funciones: filtrar los desechos y la cantidad de agua de la sangre que es expulsada como orina, dice la Biblioteca de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus. Es entonces que están compuestos de “estructuras pequeñas llamadas nefronas”. Cuando estos órganos tienen alguna complicación, se les dificulta cumplir su función.
Las personas con mayor riesgo a desarrollar insuficiencias renales son aquellas que tienen diabetes y/o presión arterial. La afección que se ve altamente relacionada con los riñones son los cálculos, unas piedras que se forman de las sustancias que componen la orina.
Cálculos renales
De acuerdo con la Clínica Mayo, los cálculos renales “son depósitos duros hechos de minerales y sales que se forman dentro de los riñones”, explica en su portal web. Los cálculos renales afectan las vías urinarias y allí se forman: “La orina se concentra, lo que permite que los minerales se cristalicen y se unan”.
La entidad explica que los cálculos en los riñones son dolorosos, pero al ser detectados oportunamente no causan ningún daño; sin embargo, para su eliminación se requiere de un tratamiento y del consumo de suficiente agua.
La Clínica menciona que los cálculos no producen usualmente síntomas; sin embargo, “si se queda alojado en los uréteres, puede bloquear el flujo de orina y hacer que el riñón se hinche y el uréter tenga espasmos, lo que puede ser muy doloroso”, precisa la entidad americana.
Entre los síntomas más comunes se encuentran, según la entidad:
- El dolor debajo de las costillas, la espalda y los costados.
- La irritación al orinar.
- El dolor que se extiende debajo del abdomen y la ingle.
- La orina de color rojo, rosado o café.
- La orina desprende un olor desagradable.
- Fiebre.
- Náuseas y vómito.
Según la entidad, los factores de riesgo que más se le atribuyen a esta complicación son la obesidad, la deshidratación, los índices genéticos, entre otros. Por esto, incluir alimentos saludables a una dieta balanceada puede ser útil para mitigar las posibilidades del desarrollo de enfermedades renales, como las semillas de albahaca.
Albahaca
El portal brasileño Tua Saúde explica que la albahaca es una planta utilizada para combatir la ansiedad, la depresión, el insomnio, entre otros.
Entre sus propiedades a destacar se encuentran las diuréticas, las digestivas y las antioxidantes. Por ejemplo, cuando un alimento es diurético —es decir, “tiene virtud para aumentar la excreción de la orina”, define la Real Academia Española (RAE)—, significa que tiene la capacidad o contribuye a combatir la retención de líquidos.
Es entonces que las semillas de albahaca están compuestas de flavonoides que son antioxidantes, mismos que eliminan los radicales libres que deterioran las células del cuerpo y reducen el desarrollo de otras enfermedades.
Estas semillas pueden ser aliadas para la pérdida de peso porque reducen el apetito, sin embargo, se sugiere consultar con un nutricionista para una ingesta regular, entendiendo sus beneficios.
El portal Deporte Saludable determina que las semillas de albahaca tienen la capacidad de regular el azúcar en la sangre que en altos niveles está asociado con diabetes.
La Organización Mundial para la Salud (OMS) explica que “la diabetes es una causa importante de ceguera, insuficiencia renal, infarto de miocardio, accidente cerebrovascular y amputación de los miembros inferiores”, que consiste en la no producción de insulina del páncreas y/o la resistencia de las células a ella.
El sitio web mencionado precisa que sus componentes favorecen la concentración, la memoria, incluso los estados de ánimo, por lo que pueden contrarrestar síntomas de la depresión, la migraña y las afecciones de la piel.