Las semillas han ganado espacio en las dietas saludables, entre otras cosas, gracias a que son fuente de grasas saludables, aportan proteínas, generan saciedad, contienen antioxidantes y son ricas en fibra y minerales como calcio, zinc y magnesio, solo por mencionar algunos.
Es larga la lista de semillas que se pueden incluir en una dieta balanceada y equilibrada para cuidar la salud del organismo se encuentran las de linaza, chía, cáñamo, ajonjolí y calabaza, así como las de girasol, a las cuales también se les conoce como “pipas”.
Este alimento destaca por su alto contenido de grasas insaturadas saludables, proteínas, fibras y vitamina E, entre otros compuestos. Una de las principales bondades que se les atribuyen es que son antioxidantes, por lo que ayudan a mantener sanas las células, así como a retardar su deterioro, según el portal El Poder del Consumidor.
Se dice que ayudan a controlar el colesterol en la sangre. Su riqueza en grasas monoinsaturadas (buenas) es la que ayuda a que este pequeño alimento ejerza un beneficio en torno al colesterol, pues evita que esta sustancia se acumule en las paredes de las arterias, previniendo el desarrollo de enfermedades cardiovasculares.
“Asimismo, el alto nivel de micronutrientes, vitaminas antioxidantes, ácido fólico y fibras potencian este efecto protector cardiovascular por cuidar las células, disminuir la presión arterial y regular el azúcar en sangre”, precisa el portal de salud y bienestar Tua Saúde.
De igual forma, al ser ricas en proteínas estas semillas ayudan a aumentar la masa muscular. Dos cucharadas poseen cinco gramos de proteína y pueden ser incluidas en las comidas del día a día, precisa la citada fuente.
Al ser fuente de minerales como el manganeso, calcio, cobre, fósforo y selenio son ideales para promover y cuidar la salud ósea. En este sentido, el calcio es clave para ayudar a mantener los huesos sanos. “Un nivel adecuado de este mineral en el cuerpo durante toda una vida puede ayudar a prevenir la osteoporosis”, precisa la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
También es destacable la cantidad de hierro que poseen, el cual ayuda a combatir afecciones como la anemia; y de potasio, que regula la actividad del sistema nervioso, según un artículo del diario La Vanguardia, de España.
Ricas en vitamina E
Una de las principales propiedades de estas semillas es que son ricas en vitamina E, un potente antioxidante que protege el tejido corporal del daño causado por sustancias llamadas radicales libres, las cuales, según la mencionada la Biblioteca de Medicina, pueden dañar células, tejidos y órganos. También se cree que juegan un papel en ciertas afecciones relacionadas con el proceso de envejecimiento.
Las células también usan la vitamina E para interactuar entre sí y les ayuda a llevar a cabo muchas funciones importantes. De igual forma, este nutriente juega un papel clave para mantener el sistema inmunitario fuerte frente a virus y bacterias, para formar glóbulos rojos y permitir que el cuerpo utilice mejor la vitamina K.
Estas semillas pueden consumirse mezcladas en ensaladas de vegetales y de frutas, en batidos o jugos. Al ingerirse de manera regular y en el marco de una dieta saludable, este pequeño alimento también ayuda a combatir el estreñimiento debido a la cantidad de fibras en su composición.
Esto ocurre porque disminuye el tiempo del tránsito intestinal y aumenta el volumen fecal. Dos cucharadas de semillas de girasol poseen alrededor de 2,4 gramos de fibras, precisa Tua Saúde.
Por último, este alimento ayudaría a mejorar el estado de ánimo. Según el portal Directo al paladar, esto se debe a que contienen muchos aminoácidos, entre ellos, el triptófano. Esta sustancia es precursora de la serotonina, que cuando hace falta en la química cerebral, está relacionada con episodios de obsesión o depresión.