Las verduras deben incluirse diariamente en la alimentación por su alto aporte nutricional y por sus beneficios a la salud.

De hecho, el portal Medical News Today reveló que la súper verdura que previene el cáncer y reduce la presión arterial es la espinaca, por sus antioxidantes, vitaminas A, C y E, fibra, fósforo y tiamina, entre otras.

La espinaca es un vegetal verde oscuro. | Foto: Lecic

Adicional, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde, señaló que “la espinaca contiene grandes cantidades de nitratos y potasio, que son sustancias que ayudan a aumentar el relajamiento de los vasos sanguíneos, permitiendo que la sangre circule con más facilidad, ayudando a disminuir la presión arterial, lo cual puede ser muy útil en los casos de hipertensión”.

Asimismo, agregó que “el magnesio presente en la espinaca, actúa como un bloqueador natural de los canales de calcio, inhibiendo la liberación de un neurotransmisor, la norepinefrina, responsable de aumentar la presión arterial, por lo que también contribuye a la reducción de la presión sanguínea”.

De igual forma, indicó que “algunos estudios en el laboratorio usando células de cáncer de cuello uterino, demostraron que los glucolípidos de la espinaca pueden destruir o, por lo menos, ayudar a disminuir la multiplicación de células cancerígenas”.

Además, añadió que “los polifenoles presentes en la espinaca, como luteína y el kaempferol, poseen una potente acción antioxidante. Asimismo, los estudios demostraron que pueden ayudar a inhibir el crecimiento de células del cáncer de mama, esófago, próstata e hígado, y causar destrucción de estas células”.

Respecto al consumo, Tua Saúde indicó que “este vegetal es muy versátil, pudiendo consumirse crudo o cocido en ensaladas, sopas, estofados y jugos naturales, siendo una opción fácil y barata. Para obtener los beneficios de la espinaca, se debe consumir alrededor de 90 g, 5 veces a la semana, lo que equivale alrededor de 3,5 cucharadas soperas de este vegetal cocido”.

La espinaca tiene vitaminas y minerales que fortalecen el cuerpo. | Foto: Getty Images

Ahora bien, lo ideal, según el portal portugués, es consumir la espinaca en las comidas principales, ya que la absorción de sus antioxidantes aumentan con la grasa de la comida, normalmente encontrada en las carnes y en los aceites de preparación de los alimentos.

Información nutricional por 100 g de espinaca cruda

  • Energía: 23 kcal
  • Carbohidrato: 3,63 g
  • Proteínas: 2,86 g
  • Grasas: 0,39 g
  • Fibras: 2,2 g
  • Calcio: 99 mg
  • Hierro: 2,71 mg
  • Potasio: 558 mg
  • Magnesio: 79 mg
  • Fósforo: 49 mg
  • Betacaroteno: 5626 mcg
  • Vitamina A: 469 mcg
  • Vitamina C: 28,1 mg
  • Vitamina E: 2,08 mg
  • Vitamina K1: 482,9 mcg
  • Ácido fólico: 194 mcg

Origen de la espinaca

La espinaca es originaria de Persia, actualmente Irán. Inicialmente, se introdujo en China y, posteriormente, alrededor del año 1000 D.C, con la expansión del pueblo musulmán, se expandió por la región europea estableciendo cultivos de explotación durante el siglo XVIII, según el Manual de Espinaca de la Cámara de Comercio de Bogotá.

El valor nutritivo de las espinacas radica en su contenido en vitaminas y minerales. | Foto: Getty Images

Además, la producción de espinaca en Colombia se realiza principalmente en los departamentos de Antioquia, Cundinamarca, y Norte de Santander, siendo Cundinamarca el departamento con mayor producción.

Adicional, hay que señalar que hoy se cultivan dos variedades de espinaca: la de hoja rizada que resiste el transporte sin apelmazarse ni echarse a perder, y se suele comercializar fresca y la de hoja lisa, fácil de lavar, que se comercializa congelada o enlatada.

De todos modos, antes de consumir algún alimento, lo primero que se debe hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista, para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.