El envejecimiento es la modificación morfológica y fisiológica que se presenta en el cuerpo con el paso del tiempo. Las personas experimentan un descenso gradual de las capacidades físicas y mentales, un mayor riesgo de enfermedad y, la vejez, sin duda, es un paso a la muerte, pero una etapa natural de todo ser humano.
Por ello, el portal Cuerpo Mente reveló que la vitamina E es un nutriente ideal para prevenir el envejecimiento prematuro, ya que es un antioxidante, lo que significa que protege el tejido corporal del daño causado por sustancias llamadas radicales libres que pueden dañar células, tejidos y órganos, según Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Así las cosas, la mejor manera de obtener los requerimientos diarios de vitamina E es consumiendo fuentes nutricionales que se encuentra en los siguientes alimentos:
- Aceites vegetales de maíz (como los aceites de germen de trigo, girasol, maíz y soya).
- Nueces (como las almendras, el maní y las avellanas).
- Semillas (como las semillas de girasol).
Adicional, esta vitamina se encuentra en los suplementos multivitamínicos y multiminerales, pero al elegir un suplemento de vitamina E, hay que tener en cuenta dos factores fundamentales:
- La cantidad de vitamina E: la mayoría de los suplementos minerales multivitamínicos diarios aportan alrededor de 13.5 mg de vitamina E, en tanto que los suplementos de vitamina E por lo general contienen 67 mg o más. Las concentraciones que contienen la mayoría de los suplementos de vitamina E sola suelen ser mucho más elevadas que las cantidades recomendadas. Algunas personas ingieren dosis elevadas, porque suponen o esperan que así se mantendrán sanas o reducirán el riesgo de padecer ciertas enfermedades.
- La forma de vitamina E: aunque la vitamina E parezca una sola sustancia, es en realidad el nombre de ocho compuestos relacionados presentes en los alimentos, entre ellos, el alfatocoferol. Cada forma tiene una potencia, o nivel de actividad, diferente en el organismo.
Además, los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) señalaron que el consumo de vitamina E dependerá de la edad y el sexo:
- Bebés hasta los 6 meses de edad: 4 mg
- Bebés de 7 a 12 meses de edad: 5 mg
- Niños de 1 a 3 años de edad: 6 mg
- Niños de 4 a 8 años de edad: 7 mg
- Niños de 9 a 13 años de edad: 11 mg
- Adolescentes de 14 a 18 años de edad: 15 mg
- Adultos: 15 mg
- Mujeres y adolescentes embarazadas: 15 mg
- Mujeres y adolescentes en período de lactancia: 19 mg
¿Puede la vitamina E ser perjudicial?
Los institutos señalaron que consumir la vitamina E presente en los alimentos no es peligroso ni perjudicial. Sin embargo, en forma de suplemento, las dosis elevadas de vitamina E podrían aumentar el riesgo de sangrado (menor capacidad de coagulación tras un corte o una herida) y en casos extremos riesgo de hemorragia grave en el cerebro (derrame cerebral hemorrágico).
¿Qué pasa si no obtiene suficiente vitamina E?
Según los NIH, la deficiencia de vitamina E es poco común en las personas sanas. Casi siempre está relacionada con ciertas enfermedades que causan una mala absorción o digestión de las grasas. Algunos ejemplos incluyen la enfermedad de Crohn, la fibrosis quística y ciertas enfermedades genéticas poco frecuentes, como la abetalipoproteinemia y la ataxia con deficiencia de vitamina E . El sistema digestivo necesita algo de grasa para absorber esta vitamina.
De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.