Al igual que las frutas, las verduras son alimentos que no pueden faltar en el plan de alimentación de ninguna persona. Su ingesta frecuente puede prevenir y ayudar a tratar diversos padecimientos gracias a las propiedades nutricionales de las mismas. Lo ideal es ingerir, como mínimo, dos porciones de una variedad de estos productos, tanto en el almuerzo como en el plato de la cena, el 50 % del plato debe estar compuesto por estos alimentos.
Lo ideal es variar las múltiples opciones que se encuentran en el mercado para poder aprovechar los nutrientes de la mayor cantidad de productos. Para poder beneficiarse al máximo de sus componentes es necesario comerlas de la manera más natural posible, es decir, si se pueden comer crudas, optar por hacerlo de esta forma, siempre y cuando estén debidamente lavadas o desinfectadas.
También se pueden comer cocinadas, pero para ello la mejor cocción es al vapor, que es la que permite que se pierda menos cantidad de nutrientes y no añadirles ningún tipo de aderezo cargado de sodio o salsa procesada, ya que no tendría sentido comerlas acompañadas de productos o alimentos nocivos para la salud.
Una de las enfermedades que más está afectando a los pacientes por estos tiempos es la subida de azúcar en la sangre, afectando tanto a personas de avanzada edad como a pacientes jóvenes, como resultado de los malos hábitos alimenticios y del sedentarismo. Generalmente, cuando un paciente presente niveles altos de glucosa (azúcar) en la sangre será diagnosticado con diabetes.
Esta enfermedad es catalogada como una enfermedad crónica por la Organización Mundial de la Salud (OMS), los pacientes tiene que tener cuidados específicos para manejarla, ya que si no se cuidan se pueden detonar otras afecciones graves o incluso la muerte.
Los pacientes deben seguir las recomendaciones médicas al pie de la letra, tener una alimentación que esté aprobada por un nutricionista, empezar a involucrar la actividad física en la rutina, hacer uso del medicamento, en dado caso de que haya sido formulado, y hacerse chequeos cada que el profesional lo indique.
La lechuga
El portal de salud, belleza y cuidado personal Cuerpo y Mente menciona que la lechuga es una de las verduras que se debe comer a diario, debido a las propiedades nutricionales con las que cuenta. La lechuga es uno de los alimentos que prima a la hora de preparar una ensalada.
Tipos de lechuga
- Romana: esta se le conoce como la “lechuga de toda la vida”, se caracteriza porque es de fácil acceso, es decir, es económica y a su vez es muy nutritiva, se reconoce porque sus hojas suelen ser alargadas.
- Escarola: suele tener un sabor amargo y su textura gruesa. Al ser rizada es ideal para engrandecer la ensalada que se vaya a preparar.
- Hoja de roble: sus hojas suelen ser de color marrón rojizo. Además, son suaves y crujientes y se suele combinar con otro tipo de lechugas.
- Iceberg: es redonda y es una de las lechugas menos nutritivas.
Entre las propiedades que se pueden destacar de estos alimentos es que posee propiedades hipoglucemiantes (reduce el azúcar en sangre), por ende es un alimento que puede ser consumido por los pacientes diabéticos sin problema alguno.
Además, es alcalinizante, refrescante y remineralizante. También cuenta con propiedades hipnóticas, que ayudan a conciliar el sueño y mejora el dolor, gracias a que cumple las funciones de un analgésico.
Gracias a sus propiedades calmantes puede ser incluida en la dieta de una persona que desea calmar sus nervios o que suele padecer de ansiedad; pese a esto, es importante recordar que ingerirla no reemplaza la medicación para estos síndromes, ni las recomendaciones del médico, solo se menciona como un completo de la dieta.