Si una persona tiene mala circulación, lo notará principalmente en las piernas y las manos. Estas extremidades son las más afectadas por esta condición. Se puede experimentar sensación de piernas dormidas, hinchazón o una sensación de hormigueo.
No son los únicos síntomas que revelan un flujo sanguíneo deficiente. Según la especialista en medicina vascular Deborah Hornacek, “otros signos asociados a la mala circulación incluyen dolor o debilidad muscular, sensación de pinchazos, palidez o incluso coloración azulada de la piel y entumecimiento”.
Si bien se suele relacionar la mala circulación con el sedentarismo, existen varias causas posibles, como el embarazo, la genética o problemas cardiovasculares como el colesterol alto o la hipertensión, entre otros.
Una de las cosas que puede ayudar a mejorar la circulación sanguínea es una dieta adecuada. El primer factor es reducir el consumo de sal. Los altos niveles de sal en la dieta pueden provocar retención de líquidos, lo que aumenta la presión arterial y la hinchazón.
Existen ciertos alimentos que pueden desempeñar un papel importante en la mejora de la circulación sanguínea. Se ha demostrado que estos alimentos proporcionan nutrientes que ayudan a mejorar el flujo sanguíneo y promueven la salud del corazón.
Ajos y cebollas
La cebolla es una excelente fuente de antioxidantes flavonoides que benefician la salud del corazón. Su consumo puede mejorar la circulación al promover la dilatación de las arterias y las venas, lo que permite un mayor flujo sanguíneo, señala Healthline.
Por otro lado, el ajo, un ingrediente icónico de la cocina mediterránea, puede mejorar la función de los vasos sanguíneos, según una investigación realizada en 2017. El ajo actúa como un anticoagulante natural, ayudando a mejorar la circulación sanguínea en los vasos.
Además, “en combinación con la cebolla, estimula la circulación y reduce la viscosidad de la sangre”, indica la clínica Madrid Vascular.
Verduras de hoja verde
Las verduras de hoja verde son beneficiosas para mejorar la circulación, ya que ayudan a reducir la inflamación y promueven la fuerza muscular. Estas verduras están llenas de vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes.
Algunos estudios sugieren que las verduras de hoja verde contienen nitrato, el cual el organismo convierte en óxido nítrico, un potente vasodilatador. El óxido nítrico ayuda a ensanchar los vasos sanguíneos, lo que mejora la circulación.
Por lo tanto, incorporar verduras de hoja verde a la dieta puede ser beneficioso para promover una mejor circulación y mantener un sistema cardiovascular saludable.
Remolacha
La remolacha es rica en nitratos, los cuales se convierten en óxido nítrico en el cuerpo. El óxido nítrico ayuda a relajar los vasos sanguíneos y aumentar el flujo de sangre hacia el tejido muscular.
Varios estudios también han demostrado que la remolacha tiene la capacidad de reducir significativamente la presión arterial, aproximadamente 4 a 10 mmHg en solo unas horas. Este efecto es más pronunciado cuando se consume remolacha cruda.
Cúrcuma
Entre los diversos beneficios para la salud que ofrece la cúrcuma, el aumento del flujo sanguíneo es uno de ellos. Tanto la cúrcuma como su compuesto químico activo, la curcumina, parecen ser capaces de estimular la producción de óxido nítrico, lo cual contribuye a mejorar el flujo sanguíneo.
Además, la curcumina muestra propiedades antioxidantes, reduciendo el estrés oxidativo en el cuerpo, y tiene efectos antiinflamatorios, disminuyendo la inflamación. Estos mecanismos de acción ayudan a promover una circulación saludable y contribuyen a la protección y el bienestar general del organismo.
Pescado
Por último, el pescado es una excelente fuente de ácidos grasos omega-3, los cuales son altamente recomendados para la salud. Entre sus muchos beneficios, estudios sugieren que estos compuestos podrían ser favorables para la circulación.
“Consumir pescado no solo puede reducir la presión arterial en reposo, sino que puede contribuir a mantener las arterias limpias y sin obstrucciones”, según indica WebMD.