Los expertos de MedlinePlus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explican que la vitamina A aporta muchos beneficios para el cuerpo humano, pues contribuye a la formación y el mantenimiento de tejidos blandos y óseos, dientes, membranas mucosas y piel sanos.
Esta vitamina es la encargada de la producción de los pigmentos en la retina del ojo, por eso también es conocida como “retinol”. Asimismo, contribuye a tener una buena vista.
La cantidad diaria recomendada de vitamina A varía para los hombres y mujeres adultos. Para los primeros es de 900 microgramos y 700 para microgramos para las segundas.
La vitamina A puede obtenerse a través de la alimentación diaria y por el consumo de suplementos. Algunos de los alimentos con niveles altos de vitamina A son los siguientes:
- Hígado de res y otras vísceras.
- Algunos tipos de pescado como arenque, salmón y aceite de hígado de bacalao.
- Huevo.
- Productos lácteos como queso y leche fortificada (consumir bajos en grasa o sin grasa).
- Cereales para el desayuno fortificados.
- Frutas y verduras de color naranja y amarillo, como zanahorias, patatas dulces, mangos y melón.
- Brócoli, espinaca y la mayoría de los vegetales de hoja verde oscuro.
Como suplemento oral esta vitamina tiene efectos positivos en personas con una mala alimentación o que tengan afecciones que incrementen la necesidad de consumir vitamina A.
De acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada la práctica clínica, la educación y la investigación, los estudios sobre el consumo de suplementos de vitamina A para el tratamiento del acné en dosis altas no parecen afectarlo. Sin embargo, explica que sí es un ingrediente que suele utilizarse en productos para combatir las arrugas: “La vitamina A se usa en cremas tópicas para reducir las arrugas finas, las manchas y las asperezas en la piel, y para tratar el acné”.
Cabe resaltar que antes de consumir cualquier tipo de suplemento, según sea el objetivo, es importante consultar con un médico para recibir la asesoría profesional adecuada y evitar complicaciones en el estado de salud.
Acné
Es una de las enfermedades más comunes de la piel. El acné es un trastorno de la piel que se da debido al taponamiento de grasa y células muertas de los folículos pilosos. Esta afección suele aparecer en partes específicas del cuerpo como la cara, la frente, el pecho, la parte superior de la espalda y los hombros.
Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación señala que los síntomas del acné pueden variar según la gravedad:
- Puntos blancos (poros tapados cerrados).
- Irregularidades sensibles rojas y pequeñas (pápulas).
- Granos (pústulas) que son pápulas con pus en la punta.
- Bultos grandes, sólidos y dolorosos debajo de la piel (nódulos).
- Bultos dolorosos llenos de pus debajo de la piel (lesiones quísticas).
Los expertos de MedlinePlus señalan que aún no hay causas claras del acné. Sin embargo, “Es probable que los cambios hormonales, tales como los que ocurren en la adolescencia o el embarazo, tengan alguna relación con su aparición. Existen muchos mitos acerca de las causas del acné
Existen algunos factores que pueden desencadenar o empeorar el acné:
- Cambios hormonales: durante la pubertad, los andrógenos aumentan en los jóvenes, las cuales hacen que las glándulas sebáceas produzcan mayor sebo.
- Medicamentos: algunas pastillas que tengan corticosteroides, testosterona o litio.
- Alimentación: las investigaciones señalan que el consumo de algunos alimentos, como el pan y las papas fritas pueden empeorar el acné.
- Estrés: según explica la entidad sin ánimo de lucro el estrés no causa acné pero puede empeorarlo.