Mantener un estilo de vida saludable, que incluya una alimentación balanceada y una actividad física regular, es importante para conservar el bienestar del organismo y la prevención de múltiples enfermedades, como el cáncer.

La ingesta adecuada de los nutrientes esenciales que requiere el cuerpo es vital no solo para su correcto funcionamiento, sino también para aportarle diversos beneficios que puedan proteger la buena salud.

La vitamina D se caracteriza por ser uno de los compuestos más importantes para el ser humano, ya que protege la estructura ósea, puesto que se encarga de favorecer la absorción del calcio, el mineral principal del que están conformados los huesos.

Este nutriente posee diversas propiedades, pero una de las que sigue llamando la atención de los investigadores es su acción para la prevención del cáncer. De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer, que hace parte de los Institutos Nacionales de Salud de EE. UU. (NIH, por sus siglas en inglés), algunos científicos han estudiado la hipótesis de si las variaciones de concentración de vitamina D en el organismo puede incidir en la aparición del cáncer.

Esta inquietud surgió como conclusión de los índices de incidencia de mortalidad de algunos tipos de cáncer, los cuales eran más bajos en las regiones donde los grados de exposición al sol eran más altos, teniendo en cuenta que la luz solar es una de las fuentes de provitamina D.

Bajo esta línea, algunas investigaciones como la del equipo liderado por la Dra. Heike Bischoff-Ferrari del Hospital Universitario de Zúrich, referenciada por el portal InfoSalus, se pusieron la tarea de comprobar cuáles eran los beneficios potenciales de la vitamina D en la prevención del cáncer.

En su experimento probaron la eficacia de este nutriente combinado con suplementos de ácidos grados omega 3 y un régimen sencillo de actividad física en individuos de 70 años o más.

“Este es el primer ensayo controlado aleatorizado que muestra que la combinación de vitamina D3 diaria, suplementos de omega-3 marinos y un programa simple de ejercicios en el hogar pueden ser efectivos en la prevención del cáncer invasivo entre adultos generalmente sanos y activos de 70 años o más”, explicó la Dra. Bischoff-Ferrari, en el medio mencionado.

De acuerdo con los resultados obtenidos, se concluyó que estos tres elementos integrados pueden contribuir a mitigar el riesgo de sufrir cáncer hasta en un 61%.

Según la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica (ASCO, por sus siglas en inglés), la alimentación y, por lo tanto, la ingesta de vitaminas, minerales y otros nutrientes puede aumentar o disminuir las posibilidades de padecer algún tipo de cáncer, y por ello ha sido un tema que sigue en investigación por los científicos.

¿Cómo tomar vitamina D?

Según la biblioteca de información sobre salud Medline Plus, el ser humano puede recibir vitamina D por medio de tres fuentes: a partir de una sana alimentación, por medio de la piel y con la ingesta de suplementos dietarios.

La Oficina de Suplementos Dietarios afirma que la cantidad recomendada de vitamina D al día puede variar de acuerdo con la edad y otras condiciones de salud. Algunas personas pueden presentar más dificultades para obtener suficiente vitamina D como los lactantes, los adultos mayores y las personas con trastornos como la enfermedad de Crohn. Otras condiciones como el color de la piel y el peso son factores que pueden incidir en los niveles de vitamina D que recibe el cuerpo.

Le puede interesar...

La cantidad recomendada diaria de este nutriente con relación a la edad es:

  • Bebés hasta los 12 meses: 10 mcg (400 Unidades Internacionales)
  • Niños de 1 a 13 años: 15 mcg (600 UI)
  • Adolescentes de 14 a 18 años: 15 mcg (600 UI)
  • Adultos de 19 a 70 años: 15 mcg (600 UI)
  • Adultos mayores de 71 años: 20 mcg (800 UI)
  • Mujeres y adolescentes embarazadas o en período de lactancia: 15 mcg (600 UI)

Cabe aclarar que la recomendación principal es acudir a los profesionales de la salud para recibir las indicaciones adecuadas, según cada caso particular.