La laringitis es la inflamación de la caja de voz (laringe) por uso excesivo, irritación o infección, de acuerdo Mayo Clinic.
Dentro de la laringe se encuentran las cuerdas vocales, dos pliegues de membrana mucosa que cubren el músculo y el cartílago. Normalmente, las cuerdas vocales se abren y cierran de manera suave, y forman los sonidos a partir del movimiento y la vibración, pero con la laringitis, las cuerdas vocales se inflaman o irritan.
Esto hace que las cuerdas vocales se hinchen, lo que distorsiona los sonidos producidos por el aire que pasa sobre ellas. Como resultado, la voz suena ronca. En algunos casos de laringitis, la voz puede ser casi imperceptible, explica Mayo Clinic.
Además, la laringitis puede ser de corta duración (aguda) o de larga duración (crónica).
La entidad sin ánimo de lucro también señaló que, en la mayoría de los casos, los síntomas de la laringitis duran menos de un par de semanas y los causa algo menor, como un virus. Con menos frecuencia, los síntomas de la laringitis tienen una causa más grave o mayor duración.
En consecuencia, los signos y síntomas de la laringitis pueden incluir:
- Ronquera.
- Debilidad o pérdida de la voz.
- Sensación de cosquilleo y aspereza en la garganta.
- Sequedad de garganta.
Además, entre las causas de la laringitis aguda se encuentran: infecciones virales similares a las que causan resfriados, estrés vocal causada por gritar o usar la voz en exceso, infecciones bacterianas aunque son menos comunes, mientras que la laringitis crónica puede ser causada por: irritantes inhalados, como gases químicos, alérgenos o humo, reflujo ácido también llamado enfermedad por reflujo gastroesofágico, sinusitis crónica, consumo excesivo de alcohol, uso habitual de la voz en exceso (como en los cantantes o las animadoras) o tabaquismo.
Asimismo, entre los factores de riesgo de la laringitis se incluyen :
- Tener una infección respiratoria, como un resfriado, bronquitis o sinusitis.
- La exposición a sustancias irritantes, como el humo del cigarrillo, el consumo excesivo de alcohol, el ácido estomacal o las sustancias químicas del lugar de trabajo.
- Usar la voz en exceso, al hablar mucho, demasiado alto, gritar o cantar.
Según Mayo Clinic, en algunos casos de laringitis provocada por una infección, esta puede propagarse a otras partes de las vías respiratorias.
Sobre la misma línea, reveló que las medidas de cuidado personal, como descansar la voz, beber líquidos y humedecer el aire, pueden ayudar a mejorar los síntomas.
De igual forma, en su portal web enumeró algunos métodos de cuidado personal y tratamientos en el hogar que pueden aliviar los síntomas de la laringitis y reducir el esfuerzo de la voz:
- Respirar aire húmedo. Utilizar un humidificador para mantener húmedo el aire dentro de su hogar u oficina. Inhalar vapor de un bol con agua caliente o una ducha caliente.
- Descansar la voz. Evitar hablar o cantar en voz demasiado alto mucho tiempo. Si se necesita hablar ante grupos numerosos, tratar de usar un micrófono o un megáfono.
- Beber mucho líquido para prevenir la deshidratación. Evitar el alcohol y la cafeína.
- Humedecer la garganta. Chupar una pastilla, hacer gárgaras con agua salada o masticar goma de mascar.
- Evitar los descongestivos. Estos medicamentos pueden secar la garganta.
- Evitar susurrar. Esto supone un mayor esfuerzo de la voz que el habla normal.
- Evitar las infecciones de las vías respiratorias altas. Lavarse las manos con frecuencia y evitar el contacto con personas que tienen infecciones de las vías respiratorias superiores, como resfriados.
- Incluir variedad de alimentos saludables en la dieta. Comer frutas, verduras y granos enteros. Estas tienen varias vitaminas, como A, E y C, que son importantes para la salud en general. Estos alimentos pueden ayudar a mantener sanas las membranas mucosas de la garganta.