Uno de los sistemas más importantes del cuerpo humano es el cardiovascular, el cual tiene como eje al corazón, el motor del organismo que, junto al cerebro, es responsable de la mayoría de procedimientos realizados por el cuerpo.
Al ser tan fundamental, es importante conservarlo en óptimas condiciones. Si no es así, se deja vulnerable al cuerpo ante la posibilidad de desarrollar falla cardiaca. Por lo tanto, la prevención de complicaciones es fundamental para no tener consecuencias en el futuro.
Una de las formas de evitar afectaciones es mediante la alimentación. Los productos selectos para la dieta influyen directamente en la salud cardiovascular. Sobre este asunto, el cardiólogo Luis Carlos Burbano habló en SEMANA sobre los alimentos menos recomendados y la relación que guarda el control de diabetes con la prevención de enfermedades cardiovasculares.
En primer lugar, Burbano explicó que para prevenir la falla cardiaca, es fundamental el tipo de dieta alimentaria que se siga. Las comidas deben ser balanceadas entre carbohidratos, proteínas de alto valor biológico y grasas saludables. Todos los productos deben estar equilibrados en la comida.
Adicionalmente, la dieta debe ser baja en azúcares refinados y sodio. En cambio, se le debe dar prioridad a los productos ricos en fibra, fruta, verduras y cereales naturales. Sumado a ello, los alimentos provenientes de grasas animales y ultraprocesados deben ser evitados en lo posible. En ese orden de ideas, los embutidos y productos de frigoríficos no son beneficiosos para la salud cardiovascular.
¿Qué pasa cuando no se sigue una dieta balanceada? Una de las consecuencias es la posibilidad de desarrollar diabetes, la cual es una condición ligada fuertemente a los problemas cardiacos. El Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales forma parte de los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos (NIDDk) explica que esta condición hace referencia a una enfermedad que se presenta cuando el nivel de glucosa en la sangre, también conocido como azúcar en la sangre, es demasiado alto.
“Un mal control de esta enfermedad diabética puede llevar a insuficiencia cardiaca, enfermedad coronaria y vascular. De la misma manera, un mal control de la insuficiencia cardiaca favorece la aparición de diabetes”, explica Burbano al hacer énfasis en la relación mutua que guardan las enfermedades.
Bajo esa lógica, las mejores recomendaciones para mantener la presión arterial en niveles estables son justamente con la dieta saludable. Bajar el consumo de sal y grasa saturadas; y priorizar la ingesta de frutas y verduras será beneficioso para el organismo; tanto para evitar enfermedades cardiovasculares, diabetes y mantener un peso estable.
Junto a la comida, el cardiólogo hace énfasis en otras recomendaciones importantes para conservar la salud cardiovascular en óptimas condiciones. Por un lado, es fundamental el papel que tiene la actividad física. “Se recomienda el ejercicio regular, metódico y progresivo como mínimo cuatro veces por semana, con una duración promedio de 45 minutos”, señala Burbano al indicar que realizarlo al aire libre es una manera sugerida para sacarle el máximo provecho posible.
También se puede practicar la rutina en una trotadora, gimnasio, bicicleta estática o elíptica. Sin importar el lugar, es fundamental mantenerse físicamente activo. “Debe buscar un buen condicionamiento físico, cardiaco y pulmonar. Esto ayudará también en la reducción de peso, tonificar músculos y modular el estrés emocional y laboral”, sostiene.