Por lo general, la mayoría de las enfermedades en los párpados no suelen ser un motivo de preocupación porque son problemas que se pueden tratar con fármacos o procesos quirúrgicos, Sin embargo, existen afecciones que pueden ser malignas y pueden llegar a poner en riesgo la vida del paciente.

Los párpados son una zona muy sensible y se encargan de proteger la superficie del ojo frente elementos extraños u otros estímulos que podrían dañarlos. Adicional a ello, cada vez que se parpadea, los ojos reciben una serie de sustancias que ayudan a mantenerlos lubricados y a evitar que se resequen.

Por lo anterior, es importante cuidar su salud para prevenir enfermedades que afecten el diario vivir. Para comprender estas patologías, la revista Mejor con Salud explica algunas de ellas que desarrollan células cancerígenas:

Queratosis actínica

Esta patología se trata de una lesión plana, blanca y escamosa que puede aparecer en los párpados y otras zonas del cuerpo. Normalmente, la superficie de cada lesión es áspera, similar al del papel de lija y se considera precancerosa porque en el 20 % de los casos evoluciona a carcinoma.

Carcinoma de células basales

Este tipo de cáncer es el más común y suele aparecer en el párpado inferior como un nódulo firme perlado. Para tratarlo, es necesario extirparlo y en algunos casos requiere de radiación complementaria. Adicional a este cáncer, existen otros tipos que perjudican la salud de los párpados:

  • Carcinoma de células escamosas: es un tipo de cáncer poco común, pero muy agresivo. Con frecuencia se forma en parte superior del párpado y es muy frecuente que comience como una queratosis actínica.
  • Carcinoma sebáceo: se caracteriza por ser un cáncer agresivo y el más peligroso entre más grande sea el tumor. Mejor con Salud detalla que es más habitual en personas mayores o de mediana edad y se debe tratar con cirugía de extirpación.

Enfermedades leves de los párpados

Mejor con Salud explica algunas enfermedades que pueden aparecer en los párpados y son leves:

  • Edema de párpado: se trata de la acumulación anormal de líquido en la superficie interna del párpado. En general, provoca hinchazón y dificulta para la apertura total del ojo, además es provocado por traumatismo, conjuntivitis, sinusitis, alergia o herpes ocular.
  • Hidrocistoma: es un quiste benigno de color claro que suele aparecer en el borde del párpado y es traslúcido. Casi siempre obedece a la obstrucción de las glándulas sudoríparas.
  • Molusco contagioso: se caracteriza por la presencia de pequeños nódulos serosos, debido a una infección viral. Normalmente, aparece en personas que tienen comprometido el sistema inmunitario. Para tratarlo es necesario realizar una cirugía para extirpar los nódulos.
  • Nevo: es un crecimiento anormal muy similar a los lunares. Se caracterizan por ser planos y otros muy elevados. Como tal, no representan ningún peligro ni deben tratarse a menos de que cambien de tamaño.