La carne de cerdo es un alimento rico en proteínas, vitaminas y minerales, además de ser ideal para el mantenimiento de los huesos; y durante el embarazo y la lactancia proporciona nutrientes necesarios tanto para la madre como para el bebé, mientras esté siendo amamantado.
Adicionalmente, el portal destaca que el alimento “contiene un 18-20 % de proteínas de alto valor biológico. Prácticamente no tiene hidratos de carbono, que se pueden complementar al cocinar. Es rica en vitaminas del grupo B y en minerales como hierro, zinc, fósforo y potasio”, argumenta el portal Porcicultura.
Al mismo tiempo, presenta en su composición nutricional importantes dosis de riboflavina y niacina que contribuirán al correcto funcionamiento de nuestro sistema nervioso. Aunque, sea un alimento muy consumido por todo el mundo, el exceso puede traer graves consecuencias, tales como:
- Enfermedades cardiovasculares: al consumirlo constantemente, especialmente las procesadas, como el tocino y las salchichas, puede aumentar el riesgo de sufrir una afectación en el corazón, como la aterosclerosis y los ataques cardíacos, pues estas carnes son ricas en grasas saturadas y colesterol, lo que contribuye al aumento del colesterol LDL (malo).
- Riesgo de cáncer: el exceso de todo alimento es malo, y más cuando se trata de carnes procesadas como el jamón y las salchichas.
Según la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), ha comentado que dichos productos se han clasificado como “carcinógenos para los humanos” y las carnes rojas igual. Dado que los compuestos químicos formados durante la cocción, como las aminas heterocíclicas y los hidrocarburos aromáticos policíclicos puede lleva este riesgo.
- Problemas de digestión: esta proteína es a menudo rica en grasas, lo que causa que sea más complicado de digerir para algunas personas. Además, sus alto contenido de este componente en ciertas preparaciones puede generar problemas gastrointestinales, como la indigestión, hinchazón y malestar individual en individuos sensibles.
- Alergias y reacciones adversas: estudios han demostrado que varios sujetos han experimentado alergias o reacciones adversas al momento de ingerir carne de cerdo. Esto puede suceder porque el ser humano puede no aceptar ciertas proteínas.
Además, la carne de cerdo también puede contener parásitos y bacterias, como la trichinella y la salmonela, que pueden causar enfermedades alimentarias y reacciones adversas en algunos casos.
- Diabetes: los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) aseguran que la diabetes es una enfermedad crónica que altera la forma en la que el cuerpo obtiene energía; tras la descomposición de alimentos, la glucosa pasa al torrente sanguíneo y es a través de la insulina que las células la obtienen, pero resulta que cuando se resisten a ella, provocan la conocida diabetes tipo II.
Quienes tienen un diagnóstico de diabetes tienen una dieta estricta, como el consumo de aquellos alimentos que son ricos en fibras como los cereales integrales (avena), ya que no solo benefician el tratamiento de la diabetes, sino que contrarrestan el estreñimiento que afecta a gran parte de la población.
Asimismo, no cualquier tipo de carne debe ser incluida en este plan de alimentación. A la lista se puede añadir el pescado que es rico en omega-3, que al ser grasa poliinsaturada ayuda a reducir el riesgo de padecer cardiopatías. Es entonces que el aguacate y las nueces pueden ser otra gran opción.
El portal de salud Tua Saúde explica que la carne debe ser baja en grasa, el pollo o el pavo sin piel. Esto debe ser revisado por un nutricionista.