El hígado y los riñones son órganos que cumplen funciones indispensables para el cuerpo humano; por ello, su cuidado es determinante para que el organismo se conserve saludable.

Los problemas en los riñones, por lo general, suelen estar asociados a cálculos renales, pequeñas piedritas que causan molestia y dolor. Por su parte, una de las afecciones que más aqueja al hígado tiene que ver con los niveles de grasa en su interior.

Por supuesto, existen más complicaciones que aquejan a estos órganos, aunque las afecciones mencionadas previamente son las más comunes. En ese sentido, ante cualquier señal de alarma, es recomendable acudir a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico preciso y definir el tratamiento adecuado.

Entre las tareas que desempeñan los riñones está filtrar y mantener la sangre libre de productos de desecho provenientes de los alimentos que las personas consumen. También se encargan de eliminar el ácido que producen las células del cuerpo y mantienen un equilibrio saludable de agua, sales y minerales.

El hígado, por su parte, se encarga de digerir los alimentos, almacenar energía y eliminar toxinas. Adicionalmente, depura la sangre y ayuda a expulsar sustancias químicas nocivas, a la vez que produce bilis, que trabaja en la descomposición de las grasas y es útil en la asimilación de vitaminas liposolubles.

Frente a la importancia que tienen los riñones y el hígado para la salud en general, es crucial tomar acciones que garanticen una condición saludable. Lo primero a lo que hay que prestarle atención es la alimentación; así mismo, es conveniente llevar hábitos de vida saludables, evitando el consumo de sustancias tóxicas y licor en exceso.

En el marco de una dieta saludable se pueden incluir alimentos que tienen propiedades ideales para la limpieza y depuración de estos órganos. Según reseña el portal Salud 180, estas son algunas frutas cuyas cualidades resultan beneficiosas para preservar la salud de los riñones y el hígado.

  • Sandía: es rica en vitamina A, vitamina C, y minerales como hierro, potasio y magnesio.
  • Melón: destaca por su alto contenido de antioxidantes y vitamina A. Además, contribuye en la hidratación.
  • Piña: esta fruta, además de ser refrescante y deliciosa, contiene bromelina, una sustancia que contribuye a reducir la inflamación.
  • Manzana: Salud 180 sostiene que el consumo diario de manzana ayuda a mejorar el tránsito intestinal. A su vez, favorece la salud del hígado.
  • Arándanos: un puñado de arándanos contribuye a rejuvenecer los órganos gracias a su alto contenido de antioxidantes.

De acuerdo con el citado portal, el consumo regular de estas frutas durante al menos dos semanas brinda un gran beneficio a la salud general tanto de los riñones como del hígado.

¿Qué se puede tomar para las piedras en los riñones?

El Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK, por sus siglas en inglés) explica que “las piedras en los riñones rara vez causan daño permanente si un profesional de la salud los trata”. Se trata de unos pequeños trozos que son de material sólido, el cual se asemeja al de una piedra y ocurren cuando hay una concentración alta de minerales en la orina. Estas piedras se pueden albergar en uno o ambos riñones.

El tamaño y la forma de las piedras en los riñones varía; pueden ser como un grano de arena o tan grandes como una arveja. El NIDDK señala que en muy contadas ocasiones pueden llegar a ser del tamaño de una pelota de golf. La textura puede ser lisa o irregular y su color puede ser amarillo o café.

Entre los síntomas más frecuentes de las piedras en los riñones que describe el Instituto están: dolor agudo en la espalda, el lado, la parte baja del abdomen o la ingle; presencia de sangre (de color rosado, rojo o café) en la orina, también llamada hematuria; necesidad constante de orinar; dolor al orinar; incapacidad de orinar o solo poder orinar una pequeña cantidad, y orina turbia o maloliente.

Se recomienda acudir al médico si la persona presenta alguno de los síntomas descritos, pues “pueden indicar que usted tiene una piedra en los riñones o un problema médico más grave”, señala el NIDDK.

Para contrarrestar y evitar las piedras en los riñones, el mismo Instituto señala que es necesario tomar agua con frecuencia, pues esto mantiene la orina diluida y ayuda a eliminar los minerales que podrían formar estar piedras.

Además, destaca que las medicinas para eliminar las piedras en los riñones se deben tomar con la autorización de un médico y hasta la fecha que el mismo indique, ya que, estos se consumen netamente para eliminar los mismos cálculos.