La Organización Mundial de la Salud enfatiza en la importancia de incluir frutas para tener una buena salud.
“Comer al menos 400 g, o cinco porciones de frutas y verduras al día reduce el riesgo de desarrollar enfermedades no transmisibles y ayuda a garantizar una ingesta diaria suficiente de fibra dietética”.
Incluir frutas en la rutina diaria aporta múltiples beneficios para la salud, incluyendo para la piel. El portal web Saber vivir destaca tres frutas, que gracias a sus propiedades, tienen efectos positivos en la salud cutánea, contribuyendo a tener una piel sana y radiante.
La primera fruta que señala el sitio web es el mango. Este alimento ayuda a proteger la piel del fotoenvejecimiento. Según indica “es una gran fuente de betacaroteno, precursor de la vitamina A, que tiene efecto antioxidante y promueve la producción de colágeno, por lo que es esencial en el proceso de renovación celular”.
La segunda opción que puede incluirse en la alimentación diaria para tener una piel joven y fresca es la patilla. Esta fruta es conocida por su contenido alto de agua, la cual la hace una opción clave si se desea mantener hidratado el cuerpo.
Asimismo, es un alimento que tiene beneficios para la piel. “Según un ensayo clínico realizado por el Departamento de Dermatología de la Universidad de Manchester (Reino Unido), el licopeno protege la piel frente al daño producido por la radiación solar. Este compuesto está presente en los vegetales rojos como la sandía, el tomate, el pimiento rojo, etc.”.
La tercera fruta que tiene efectos positivos en la piel es el kiwi. De acuerdo con Saber vivir “contribuye a mantener la flexibilidad cutánea y, según un estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition, ayuda a reducir las arrugas”.
Para recibir mayor información profesional sobre cómo incluir estas tres frutas en la dieta se deba acudir a un nutricionista, quien puede brindar un plan de comidas especializado.
¿Cómo tener una piel sana?
Tener una rutina diaria saludable es clave para mantener una piel sana y radiante. La protección solar es indispensable para evitar arrugas prematuras y otras afecciones a temprana edad.
Existen dos tipos de rayos solares que pueden suscitar afectaciones en la piel: ultravioleta A (UVA) y ultravioleta B (UVB). Los primeros dañan las capas profundas de la piel y los segundos, las capas externas de la piel, además de causar quemaduras, explica Medline Plus.
La protección es la clave para prevenir los daños cutáneos. Se debe evitar, lo máximo posible, la exposición a los rayos solares. Aunque realizar esto en la rutina diaria puede ser una tarea complicada, los expertos de Medline Plus recomienda algunas soluciones para el cuidado de la piel.
- Evitar la exposición al sol es el paso más importante para la prevención de los signos del envejecimiento y el desarrollo de problemas en la piel. La exposición debe evitarse durante las 10:00 a. m. hasta las 4:00 p. m, debido a que en ese horario los rayos solares UV se intensifican.
- Se debe usar protector solar (fotoprotector) incluso en los días donde, aparentemente no hay sol. También se recomienda su aplicación diaria, aunque no se exponga la piel directamente a la luz solar. Las pantallas como las tabletas, celular y computadores también afectan la salud cutánea.
- No utilizar lámparas o máquinas para broncearse. Existen algunas empresas estéticas que cuentan con este servicio, pero la verdad es que exponerse a estos procedimientos, al menos 15 minutos, es igual de peligroso que estar expuesto a un día de sol.
- Es importante tener en cuenta que en los lugares donde hay mayor altitud, más rápido se quema la piel.
- Las gorras, sombreros, gafas y las sombrillas son aliados para la protección contra los rayos solares.