Sin duda, los últimos meses, en Colombia, han sido los más lluviosos, y aunque pareciera que va a salir el sol, algunas personas siguen contrayendo enfermedades respiratorias, entre ellas dolor de garganta.
En concreto, el dolor de garganta se traduce en una irritación o carraspera de esa zona, que a menudo empeora al tragar. Además, viene acompañada de ardor, picazón, y la necesidad de rascarse, que no es para nada agradable, especialmente si la persona tiene otros síntomas de resfriado.
Los especialistas de la Clínica Mayo, señalan que la causa más frecuente del dolor de garganta (faringitis) es una infección viral, como un resfrío o la gripe. Aunque también existen otras causas como inflamación estreptocócica, amigdalitis, alergias, mononucleosis, o fumar en exceso.
Ahora bien, también se puede producir la bronquitis, la cual es una inflamación de las vías aéreas principales que provoca tos y otros problemas respiratorios.
Por otra parte, la bronquitis aguda puede ser causada por una infección viral o un resfriado, mientras que la bronquitis crónica se produce sobre todo en fumadores o en personas con enfermedades pulmonares a largo plazo, como el enfisema. En ambos casos, produce una tos que puede formar tejido cicatricial en los pulmones e impedir una respiración correcta, según el portal Mejor con Salud.
Infusión de laurel
Ingredientes:
- 2 tazas de agua (500 ml).
- 6 hojas de laurel o 5 gotas de aceite de laurel.
Preparación:
- Hervir los 2 vasos de agua y, cuando llegue al punto de ebullición, retirar del fuego y añadir 6 hojas de laurel o 5 gotas de aceite esencial de laurel.
- Verter el agua caliente en un bol.
- Cubrir la cabeza con una toalla y colocar la cara cerca del bol (a una distancia prudente) de manera que se pueda inhalar el olor del vapor de laurel.
- Repetir tantas veces que se considere necesario para obtener el alivio.
Jugo de jengibre, cebolla y cúrcuma
Al combinar la cúrcuma con la cebolla, este remedio es capaz de abrir los bronquios, desinflamar los alvéolos y favorecer la eliminación de la mucosidad y las sustancias nocivas.
Ingredientes:
- 50 g de raíz fresca de jengibre.
- 1 cucharada pequeña de cúrcuma.
- 1 cebolla.
- 2 cucharadas de miel.
- 1/2 litro de agua.
Preparación:
- Hervir el agua y cuando haya alcanzado el punto de ebullición, agregar la cebolla pelada y cortada, el jengibre a rodajas y la miel.
- Dejar cocinar durante unos 40 minutos a fuego medio e ir removiendo para que todo se integre.
- Cuando la mezcla esté un poco espesa, apagar el fuego y tapar la olla.
- Luego, dejar que repose durante 60 minutos y, pasado este tiempo, colar el preparado.
- Verter el jugo obtenido en un frasco de vidrio oscuro y tomar 2 cucharadas por la mañana y otras 2 cucharadas por la tarde.
Bebida de jengibre y limón
Esta infusión cuenta con propiedades antitusivas, expectorantes, antibióticas y antiinflamatorias que la convierten una excelente aliada para combatir la gripe, la tos o los resfriados, según el portal Mejor con Salud.
Ingredientes:
- 1/5 limón.
- 240 ml de agua.
- 1 cucharada de jengibre rallado.
Preparación:
- Poner a hervir el agua y agregar el jengibre.
- Dejar hervir durante 5 minutos y dejar reposar otros 5 minutos.
- Colar la infusión de jengibre y añadir el zumo de limón previamente exprimido.
- Servirlo en una taza y agregar miel para endulzar (opcional).
Infusión de manzanilla con miel
El té de manzanilla con miel es una mezcla eficaz contra el dolor de garganta, ya que además de la miel, que ayuda a hidratar los tejidos irritados, la manzanilla tiene una fuerte acción astringente y antiinflamatoria que ayuda a calmar el dolor de garganta.
Ingredientes:
- 1 cucharadita de flores secas de manzanilla
- 1 cucharadita de miel
- 1 taza de agua hirviendo.
Preparación:
- Colocar las flores de manzanilla en la taza de agua hirviendo, cubrir y dejar reposar de cinco a diez minutos.
- Finalmente, agregar la cucharada de miel, colar y beber dos a tres veces al día.