Muchas personas, cuando están inconformes con su peso, buscan fórmulas mágicas y métodos rápidos para lograr disminuir tallas, pero los expertos aseguran que para lograr mejores resultados se debe tener constancia y hay que realizar cambios en la alimentación y aumento de la actividad física.

De hecho, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, reveló que la base para lograr adelgazar sigue siendo una dieta saludable de bajas calorías que debe tener proteínas, grasas, carbohidratos, frutas, verduras y todos los nutrientes que el cuerpo necesita. Pero adicional, hay bebidas que se pueden incluir y que ayudan con el proceso como, por ejemplo, las infusiones que aceleran el metabolismo y que son diuréticas.

Por ello, el Portal Todo para Ellas reveló que las plantas medicinales que más ayudan para bajar de peso son: diente de león, fresno y malva. Lo ideal es consumirlas en infusión.

Sobre la misma línea, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos,

reveló en su portal web algunas recomendaciones para bajar de peso:

1. Mantener los alimentos saludables a la vista. Esto con el fin de evitar las comidas no saludables.

2. Reducir la tentación. Hay que mantener las gomitas, galletas, dulces y frituras, entre otros, fuera del alcance.

3. Siempre comer de los platos. Comer directamente de un recipiente o de una bolsa promueve el consumo excesivo de alimentos.

4. Utilizar platos más pequeños. Si se empieza una comida con menos alimento al frente, probablemente se comerá menos cuando se termine.

5. Desayunar. Un estómago vacío es una invitación a comer en exceso. Por ello, se debe comenzar el día con pan integral o cereales, leche baja en grasa o yogur y un pedazo de fruta.

6. Planear con anticipación. No esperar hasta tener hambre para decidir qué comer. Lo ideal es planear las comidas y con eso las opciones poco saludables serán más fáciles de pasarlas por alto.

7. Apagar la pantalla. Comer con los ojos puestos en la televisión, la computadora o cualquier otra pantalla distractora aleja la mente de lo que se está comiendo. No solo se pierde la degustación de los alimentos, sino que se es más propenso a comer en exceso.

8. Comer alimentos saludables primero. Empezar con la ensalada y con eso se tendrá menos hambre cuando toque el plato principal.

9. Comer refrigerios pequeños con frecuencia. En lugar de dos o tres comidas grandes, se pueden ingerir comidas más pequeñas y refrigerios saludables para pasar todo el día.

Asimismo, es importante realizar actividad física y las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes. Lo vital es que se tenga un gasto energético.

Respecto a la actividad física, los ejercicios de cardio —también conocidos como ejercicios aeróbicos— son los más implementados cuando se busca quemar calorías y reducir el peso corporal. Sin embargo, los que involucren pesas ayudan al cuerpo a quemar grasa, mientras se construye masa muscular, lo que también funciona para acelerar el metabolismo.

Por su parte, las personas se preguntan cuál es la mejor hora para hacer ejercicio y, por tal razón, los expertos aseguran que es una cuestión de preferencia, gusto y horarios. Lo importante es cumplir los objetivos diarios.

De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.