Al no haber circulado a lo largo de la pandemia por la covid-19, la gripa y otros virus respiratorios pudieran aparecer más fuertes y con mayor duración debido al resentimiento en la inmunidad colectiva. Así lo aseguran científicos españoles del Centro Nacional de Gripe de Valladolid, en España.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado en sus informes que las mascarillas, la caída de la movilidad y la merma de la acción social están detrás de la escasa incidencia de otros virus respiratorios.
En la temporada 2020 /2021, el Sistema de Vigilancia de la Gripe en España (SVGE), del Instituto Carlos III en el país ibérico, notificó únicamente 12 casos de gripa, frente a los 9.391 de la temporada 2019/2020, cuando todavía la covid-19 no se había convertido en una pandemia mundial. ¿Esta situación a qué obedece? Según asegura el diario La Razón de España, los expertos explican un conjunto de factores.
De acuerdo con el vicepresidente de la Sociedad Española de Epidemiológica, Óscar Zurriaga, la baja incidencia de gripa se debió a las medidas no farmacológicas para frenar la covid-19, sobre todo por el uso constante de los tapabocas, aunado a la distancia social.
También contribuyó a la proliferación de casos el despliegue de los sistemas de vigilancia en cada país. “Fue muy difícil hacer un seguimiento de la gripa porque centraron todos sus esfuerzos en la detección del SARS-CoV-2, así que quizá muchos casos pasaran desapercibidos”, señala Zurriaga al medio español.
Asimismo, explica el especialista, que las medidas anti-covid cortaron totalmente toda cadenas de transmisión de cualquier virus respiratorios. Una situación inusual que ha hecho plantearse a un grupo de científicos cómo se comportará el virus de la gripa a principios del mes de octubre, considerando que la población carece de inmunidad contra la gripa al haber estado menos expuesta a ella.
Según un estudio realizado por expertos del Centro Nacional de Gripe de Valladolid, los hospitales Clínico Universitario y Río Hortega y la Universidad de Valladolid, la próxima epidemia de gripe en España podría empezar antes y ser más grave y duradera.
Advierte Raúl Ortiz de Lejarazu, responsable científico del Centro Nacional de Gripe de Valladolid, que la ausencia de circulación de ciertos patógenos puede conducir a una disminución de la inmunidad colectiva frente a ellos. “Esto puede promover el aumento de epidemias más graves y duraderas que comienzan antes”, dice.
Este estudio también afirma que la inmunidad protectora contra ciertos virus respiratorios tiene una duración limitada en el tiempo y que la protección serológica después de la exposición a algunos de ellos, ya sea por vacunación o de forma natural, comienza a declinar incluso en unos pocos meses.
“En el caso de la gripa, algunos autores han determinado que la protección serológica cae entre el 6 y el 11 por ciento cada mes después del pico máximo de anticuerpos”, completa Ortiz.
Los científicos aseguran que la seroprotección tras la vacunación antigripal cae por debajo del 60 por ciento frente a los subtipos de gripe A (H1 y H3) y de gripe B un año después de la inmunización.
En este sentido, alerta el médico Sanz Muñoz, del mismo centro científico, que la inmunidad ante la gripa común está bajando y la siguiente epidemia pudiera ser peor en tres aspectos: empezar antes, durar más y ser más grave.
Los investigadores se basan en estudios previos para realizar estas predicciones. Han extrapolado los datos de gripa en inviernos con temperaturas templadas, en aquellos lugares en los que se contagia menos de gripe. Los resultados son concluyentes: cuando la gripe se contagia menos la inmunidad se resiente, de forma que en el 72 por ciento de las siguientes epidemias comienzan antes y son más largas y severas.
Otros epidemiólogos afirman que es difícil aventurar cómo será la próxima temporada gripal en España. Pedro Gullón, médico especialista en medicina preventiva y salud pública, explicó al diario La Razón que todo dependerá si mantienen algunas de las medidas anti covid-19, como la limitación de aforos en eventos, y si se respeta el uso de mascarillas en interiores.
“Lo único previsible es que la gripa es imprevisible”, completa por su parte, el especialista Pedro Alsina Mier a la vez que aclara que no se puede dar nada por hecho, tal y como se ha demostrado con el Virus Respiratorio Sinticial (VRS), un organismo viral que comúnmente causa bronquiolitis y neumonía en niños y bebés.
Según informó el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, los casos de gripa han mermado en un 98 por ciento. Casos similares se han producido en Australia, Chile o Sudáfrica.