Es normal que con el pasar de los años la memoria comience a fallar, y se olviden las llaves del automóvil u el nombre de una persona que se acababa de conocer.

Sin embargo, hay síntomas que podrían indicar que el problema puede estar avanzando, como, por ejemplo, hacer las mismas preguntas una y otra vez: ¿Qué hora es? ¿Qué día es hoy? Además, cuando se está perdiendo la memoria, es común que se olviden diálogos y hechos recientes.

La demencia es, en la actualidad, la séptima causa de defunción. | Foto: COPYRIGHT DAZELEY NOT ASSIGNED

Adicional, es habitual que la persona que está teniendo la afección insista en temas que ya se han tratado, que olvide palabras comunes al hablar, que mezcle palabras: decir “cama” en lugar de “mesa”, por ejemplo.

Entre tanto, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, añadió otros síntomas:

  • Demorarse más en realizar tareas conocidas, como seguir una receta.
  • Colocar objetos en lugares inapropiados, como por ejemplo, poner una billetera en el cajón de la cocina.
  • Perderse al caminar o manejar en una zona conocida.
  • Tener cambios en el estado de ánimo o en el comportamiento sin razón aparente.
La demencia es el resultado de diversas enfermedades. | Foto: Getty Images

Factores que aumentan el riesgo de sufrir demencia

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la demencia es un término que engloba varias enfermedades que afectan a la memoria, el pensamiento y la capacidad para realizar actividades cotidianas, y entre los factores que aumentan el riesgo de sufrir demencia cabe destacar:

  • La edad (es más común en personas de 65 años o más).
  • Un exceso de azúcar en la sangre (diabetes).
  • El exceso de peso o la obesidad.
  • El tabaquismo.
  • El consumo excesivo de alcohol.
  • La inactividad física.
  • El aislamiento social.
El envejecimiento normal no conduce a una pérdida drástica de la memoria. | Foto: Getty Images

“La demencia es un síndrome que puede deberse a una serie de enfermedades que, con el tiempo, destruyen las células nerviosas y dañan el cerebro, lo que generalmente conduce al deterioro de la función cognitiva (es decir, la capacidad para procesar el pensamiento) más allá de lo que podría considerarse una consecuencia habitual del envejecimiento biológico”, explicó la OMS.

Asimismo, puntualizó que actualmente, más de 55 millones de personas tienen demencia en todo el mundo, más del 60 % de las cuales viven en países de ingreso mediano y bajo.

De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud.