Aunque la serotonina es una sustancia química que el cuerpo produce de forma natural y que es necesaria para que las células nerviosas y el cerebro funcionen, debido a los niveles de estrés, cansancio, tensiones en el trabajo y en otros entornos, expertos aconsejan el consumo de algunos alimentos que contienen vitaminas que permiten mantenerla en niveles adecuados.

Especialistas han advertido que tenerlos por debajo de lo normal se asocia a enfermedades mentales, como el autismo, la esquizofrenia, hiperactividad, depresión, ansiedad, trastorno obsesivo-compulsivo, agresividad, insomnio, estrés.

Esta sustancia química funciona como neurotransmisor (sustancia que usan los nervios para enviarse mensajes entre sí) y vasoconstrictor (sustancia que hace que los vasos sanguíneos se estrechen); también se le conoce como 5-hidroxitriptamina.

Para mantener los niveles adecuados de serotonina, expertos aconsejan consumir alimentos ricos en triptófano, como pavo, pollo, leche, queso, pescado, huevos, tofu, soja, semillas de ajonjolí y de calabaza, nueces, maní y mantequilla de maní.

En lo que sí han sido enfáticos es que lo que se busca es equilibrar, no excederse porque, según explicaron, demasiada serotonina causa signos y síntomas que pueden variar de leves (temblores y diarrea) a graves (rigidez muscular, fiebre y convulsiones).

Síntomas

Los expertos pidieron tener en cuenta los siguientes síntomas que evidenciarían la necesidad de aumentar los niveles de esta sustancia química natural

- Sensación de fatiga y falta de energía.

- Problemas para conciliar el sueño o, lo contrario, dormir mucho.

- Apatía y desmotivación.

- Problemas digestivos, tener un intestino irritable.

- Autoestima baja.

- Falta de memoria y problemas para concentrarse.

- Depresión, irritabilidad, tristeza.

- Falta de autocontrol emocional

- Ansiedad

- Actitud pesimista, cualquier decisión cuesta más

- Cambios repentinos en la temperatura corporal.

Otras de las razones son: una vida poca activa, es decir, ser sedentario, la presencia de algunas enfermedades físicas, la falta de luz solar, factores genéticos, circunstancias difíciles y persistentes en la vida, cambios hormonales (embarazo, parto, menopausia) y abuso de sustancias adictivas.

Actividad al aire libre: La luz solar es esencial para la generación de serotonina. Foto: Getty Images. | Foto: Foto: Getty Images.

Alimentos básicos

Entre las recomendaciones que entregan los expertos para tener un equilibrio en los niveles de serotonina se encuentran:

- Sostener una alimentación equilibrada. En este punto es importante tener en cuenta las vitaminas que tienen algunos alimentos y que ayudan a ese objetivo.

Zinc: Su carencia está asociada a períodos de astenia, falta de apetito, caída del cabello, gripe o depresión. El marisco, las nueces, los cereales integrales o la carne son alimentos ricos en esta vitamina.

Magnesio: Previene el insomnio, el estrés, la debilidad o la hiperactividad, entre otros. Se encuentra en la leche, la quinoa, la carne roja, los vegetales de hoja verde o el marisco.

Vitamina C: Ayuda al sistema inmunológico en momentos de estados de ánimo negativos, alto estrés físico y mental. Alimentos como la guayaba, el kiwi y la espinaca, ayudan.

Vitamina B6 y B12: Se trata de vitaminas que sirven para la formación de glóbulos rojos y para el funcionamiento del sistema nervioso, por lo que ayudan a tener un estado de ánimo positivo. Su carencia provoca altos niveles de irritabilidad, dificultad para concentrarse o cansancio. El pollo, las alubias, la papa o el plátano, son importantes.

- Mantener una actividad física constante y moderada, ya que esto estimula la producción de serotonina. Vale cualquier tipo de deporte o actividades moderadas como caminar, yoga, bicicleta, etc.

- Bajar el nivel de estrés: otra recomendación, sobre todo para las personas que tienen una vida estresada, es practicar meditación, ejercicios de respiración o técnicas de relajación y, muy importante, cuidar el sueño.

- Marcar nuevos objetivos: hay que generar nuevos objetivos o proyectos que nos motiven, cambiar de vez en cuando de actividades. Viajar y tener varias actividades de ocio, ayudan a mejorar nuestra filosofía de vida e incrementan la sensación de bienestar.

- Actividad al aire libre: La luz solar es esencial para la generación de serotonina.