El laurel es un árbol frondoso de aproximadamente 10 metros de altura. Sus hojas han sido alabadas durante años pues, en la antigüedad, sobre todo en Grecia y en Roma, se adornaban con coronas de laurel a aquellas personas que salieran victoriosas de alguna contienda.
En la actualidad las hojas de laurel son un buen acompañante en la gastronomía. Se pueden usar frescas o secas como condimento de diferentes platillos como carne, el pescado, las sopas, entre otras. Además, se pueden recolectar en cualquier época del año.
Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, entre componentes del laurel se encuentran en el eugenol, los cuales, contribuyen a reducir los gases acumulados en el organismo.
También, “contiene diversos ácidos orgánicos, minerales (como hierro y calcio) y otras sustancias con acción antioxidante (como la vitamina A) y bactericida”, explica la institución. Así mismo, el laurel se considera una planta beneficiosa para el sistema digestivo y para el sistema respiratorio.
De igual forma, el portal especializado Salud180 explicó que esta hierba reduce los niveles de estrés y ansiedad, ya que contienen una sustancia llamada linalol, la cual, se considera un aceite esencial muy útil para calmar la mente y reducir el nivel de cortisol en la sangre.
Para usar el laurel para tratar el estrés y la ansiedad, el portal Mejor con Salud indicó que se necesita: un litro de agua, dos ramas de canela y cinco hojas de laurel.
Preparación:
1. Poner el agua a calentar en una olla.
2. Cuando el agua comience a hervir, agregar la canela y el laurel.
3. Dejar cocinar por 20 minutos más.
4. Una vez se cumpla el tiempo, bajar del fuego y dejar reposar por 30 minutos.
5. Colar y beber en pequeños sorbos antes de cada comida.
Por otro lado, el laurel actúa como estimulante en casos de fatiga física, ya que reactiva el tono muscular. Adicional a ello, mejora la circulación sanguínea y ayuda a superar la fatiga mental, pues fortalece el sistema nervioso.
Incluso, Mejor con Salud explicó como quemar hojas de laurel con el fin de ayudar a recuperar al cuerpo del cansancio y relajarse después de una ardua rutina diaria. Para ello se necesita un envase donde poder quemar las hojas con seguridad.
Procedimiento:
1. En el recipiente poner las tres hojas de laurel.
2. En una habitación vacía, encender las hojas de laurel con ayuda de fósforos.
3. El olor que suelta el laurel relajará el cuerpo.
4. Se debe tener precaución y llevar control de las hojas para no provocar accidentes.
Además de lo anterior, las hojas de laurel también reducen la inflamación en todo el cuerpo, especialmente de las articulaciones, debido a que contienen eugenol, un compuesto que puede actuar como antiinflamatorio.
En la misma línea, esta planta, junto con otras llamadas medicinales, podría actuar en el desequilibrio de una enzima denominada ureasa que está relacionada con varios trastornos gástricos que dan origen a cálculos renales, según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Finalmente, un estudio del Departamento de Nutrición Humana, Universidad Agrícola NWFP, de Pakistán, demostró que la hoja de laurel contribuye a mejorar las funciones de la insulina y son una buena medicina para abrir las vías respiratorias. Si las personas sufren de asma o tienen problemas con las alergias, será un aliado ideal.