Cuando una persona padece una afección como el estreñimiento, en la cual las evacuaciones se dificultan y en algunas oportunidades suelen causar dolor, una de las primeras alternativas es movilizarse a alguna farmacia para adquirir un remedio comercial.

Sin embargo, cuando por alguna condición médica no se puede consumir un jarabe o una pastilla, diferentes elementos de origen natural surgen como una gran opción para evacuar las heces y combatir el estreñimiento. El portal Mejor con Salud hizo una lista de estos laxantes naturales.

1. Ciruelas y miel. “Estudios e investigaciones avalan el uso de ciruelas y miel, respectivamente, para mejorar la función intestinal y revertir los episodios de estreñimiento. Las primeras lo logran por su alto contenido de fibra, mientras que la miel hace lo propio gracias a la absorción incompleta de la fructosa”, inicia explicando la plataforma.

2. Aloe vera. “Los expertos han usado aloe vera como remedio natural y paliativo contra los síntomas del síndrome del intestino irritable. El estreñimiento suele ser uno de ellos, de manera que puedes aprovechar esta planta como laxante”.

El jugo de aloe vera se suele preparar sin ningún aditivo. Getty Images. | Foto: Getty Images

3. Zumo de uva y linaza. “Se sabe que la linaza tiene propiedades que son de gran ayuda para controlar episodios de estreñimiento y diarrea. En cuanto a las uvas, se ha sugerido que una dieta rica en estas frutas puede ser útil como tratamiento conservador”.

4. Compresas de aceite de ricino. “La eficacia del aceite de ricino como laxante natural para el estreñimiento ha sido corroborada por estudios científicos. Incluso se ha empleado en adultos mayores con efectos positivos para controlar los síntomas”.

5. Plántago. “La evidencia respalda el uso de plántago para tratar el estreñimiento. En principio, funciona atrapando el agua en el intestino, lo que a su vez permite el incremento del agua en las heces. Esto facilita su evacuación de manera natural, en especial en pacientes con una manifestación crónica de este problema intestinal”.

6. Manzanas. “Esta deliciosa fruta (ya sea roja o verde) contiene una sustancia llamada pectina que promueve la motilidad intestinal, ablanda las heces (por la cantidad de fibra) y favorece su expulsión. Junto con otras frutas forma parte de la dieta para el estreñimiento que suelen recomendar los especialistas”.

Las semillas de la papaya y la manzana. | Foto: Getty Images

7. Plátano o banano. “Es otra de las frutas que aporta una gran cantidad de fibra (además de potasio), siendo un poderoso laxante. Una pieza de plátano aporta el 12 % de fibra que el cuerpo necesita por día. Además, contiene oligosacáridos, sustancias que llegan sin digerir al intestino grueso, lo que favorece la digestión y evacuación”.

8. Aceite de oliva. “Un trabajo publicado en Journal of Renal Nutrition encontró que el aceite de oliva puede tener propiedades laxantes. Los expertos encontraron que 4 ml/día de aceite de oliva son suficientes para controlar y reducir los síntomas primarios del estreñimiento. Puedes beber una cucharada pequeña en ayunas para mejorar tu función intestinal”.

9. Semillas de chía. “Los especialistas destacan la fibra presente en las semillas de chía. Para ser más precisos, contienen una gran cantidad de fibra insoluble, de manera que promueven las heces blandas. Puedes incluirlas en tu desayuno, comerlas directamente o hacer infusiones con ellas. Cualquier método es efectivo para aprovechar sus propiedades laxantes naturales para el estreñimiento”.

10. Kéfir. “Un trabajo publicado en Turkish Journal of Gastroenterology encontró que los suplementos de kéfir son eficaces para mejorar los síntomas en pacientes con estreñimiento crónico. El kéfir es uno de los mejores probióticos disponibles en la actualidad, de manera que te invitamos a incluirlo en tu dieta”.

Kéfir | Foto: Getty Images

11. Kiwi. “Por último, y de acuerdo con la evidencia, el kiwi es una de las mejores frutas para aliviar los síntomas del estreñimiento. Promueve el libre movimiento de los intestinos, de modo que pueden modular la función gastrointestinal”, concluye el sitio.

Antes de consumir un nuevo alimento es oportuno que un profesional de la salud lo autorice según las condiciones de cada persona.