Los legisladores estatales de Luisiana aprobaron este miércoles una nueva regulación del aborto según la ley del latido: prohíbe la interrupción del embarazo tras la sexta semana, cuando generalmente se detecta el primer latido en el corazón del feto. A falta de que la firme, el gobernador demócrata John B. Edwards ya ha expresado su apoyo, con que Luisiana se convertirá en el último estado en aprobar una norma similar. Este mismo año, Kentucky, Ohio, Misisipi y Georgia aprobaron la ley del latido. Y en Iowa un juez federal dictaminó inconstitucional una norma similar. El pasado 24 de mayo, el gobernador de Misuri, Mike Parson, promulgó una ley que prohíbe el aborto tras la octava semanas de gestación. Poco antes, Alabama promulgó la ley del aborto más restrictiva ya que no contempla excepciones ni siquiera en casos de violación o incesto, y amenaza con cadena perpetua a los médicos que practiquen interrupciones del embarazo. Ley del latido Las leyes aprobadas por varios de estos estados prohíben que un médico que practique un aborto después de que se haya detectado el latido del corazón del feto.cEsto sucede en la sexta u octava semana de gestación. Y en ese momento es muy posible que la mujer no sepa que está embarazada. Es por esto que sus críticos consideran a la ley del latido virtualmente un veto.
Algunos estados han aprobado su ley del latido contemplando excepciones para los casos en que la mujer esté en peligro o el embarazo fue fruto de una violación. Pero en Alabama, por ejemplo, no está prevista ninguna excepción y se castiga duramente al médico que practique la interrupción del embarazo. Batalla legal Los activistas a favor del derecho a decidir se han dado a la tarea de desafiar estas leyes ante la justicia. El Centro para los Derechos Reproductivos, con sede en Nueva York, presentó en marzo una demanda contra la nueva ley de Misisipi. "Están determinados a quitarle a Misisipi el derecho al aborto, y lo están haciendo a costa de la salud de las mujeres y el dinero de los contribuyentes", dijo en un comunicado Hillary Schneller, abogada del centro. "Esta prohibición, al igual que la de las 15 semanas que el gobernador firmó el año pasado, es cruel y claramente inconstitucional". Con estas palabras Schneller aludía a una ley anterior firmada por el gobernador Phil Bryant que prohibía la mayoría de los abortos después de 15 semanas de gestación y que fue anulada por un juez federal que la consideró inconstitucional. Una ley en Kentucky igual a la de Misisipi fue inmediatamente disputada por la Unión Estadounidense de Libertades Civiles tras la firma del gobernador Matt Bevin el 14 de marzo, y un juez federal la bloqueó temporalmente.
Foto: En diferentes estados se han desarrollado varias protestas por las nuevas leyes para regular el aborto. / Getty. Además, también en marzo, un juez federal bloqueó otra ley de Kentucky que prohibía el aborto a las mujeres que expresaran su intención de interrumpir el embarazo por el género, raza o incapacidad del feto. Y en Iowa un juez federal también frenó la norma aprobada en ese estado. El desafío al derecho al aborto Y aunque todos esperan que los jueces las bloqueen por ser inconstitucionales, lo que buscan es que el asunto vuelva a llegar al Tribunal Supremo. Esto, porque el derecho al aborto fue declarado parte del derecho constitucional a la privacidad en el caso Roe vs. Wade. La más alta instancia judicial en EE.UU. reafirmó su decisión en 1992 al señalar que las restricciones al aborto no pueden suponer un "obstáculo indebido" a la mujer. Y más recientemente, en 2016 la alta corte derogó una ley de Texas que ponía lo que consideró demasiadas dificultades a las clínicas donde se practican abortos. Pero con el nombramiento por parte del presidente Donald Trump de dos nuevos magistrados, la Corte Suprema cuenta ahora con una mayoría de jueces conservadores. Es por eso que los políticos antiaborto buscan que sus restrictivas leyes lleguen al máximo tribunal, que este revierta la decisión de 1973 y deje de considerar el aborto un derecho de la mujer.