El organismo humano tiene su propio escudo para defenderse de los ‘enemigos’ de la salud, que buscan atentar contra el bienestar físico y emocional de las personas. Este se conoce como sistema inmune, inmunitario o inmunológico, y es el encargado de librar al individuo de las afecciones que pueden alterar al cuerpo.
Según explican desde la organización sin ánimo de lucro Kids Health, en el día a día, las personas están expuestas a miles de bacterias, virus y microorganismos que están presentes en el ambiente, por lo que la función de las defensas que tiene el ser humano es esencial.
Este sistema se encarga de identificar la presencia de un huésped inesperado en el organismo y lo combate para que no ponga en riesgo la salud. Es por ello que los profesionales de la salud insisten en mantener buenos hábitos que favorezcan el funcionamiento correcto de la ‘barrera de protección’ que posee el cuerpo.
Para lo anterior es importante tener rutinas adecuadas de higiene personal, mantener una alimentación balanceada y rica en nutrientes esenciales, realizar actividad física regular, adoptar las recomendaciones de los médicos (sobre todo en relación a vacunas, medicamentos u otros tratamientos de acuerdo con la condición de salud) y siendo respetuoso del tiempo de descanso.
¿Puede influir la alimentación en la salud del sistema inmune?
Los nutrientes son indispensables para el organismo humano, estos generalmente se obtienen a partir de la alimentación, por lo que escoger selectivamente los ingredientes que hacen parte del menú diario puede incidir en la salud del cuerpo en general y, por tanto, del sistema inmune.
Entre los componentes recomendados para fortalecer las defensas se encuentran las vitaminas, como la C, así como otros elementos antioxidantes que prevengan el daño de las células. Así pues, el portal Cuerpo Mente entrega la receta de un licuado con una variedad de ingredientes, todos ellos con un gran valor nutricional.
Por una parte, las naranjas, de acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición, contienen un aporte significativo de vitamina C, incluso superior a la cantidad mínima recomendada al día, pero además es rica en otros nutrientes como los folatos, la provitamina A, ácido cítrico, ácido málico y flavonoides, estos últimos reconocidos por su efecto antioxidante.
A esta fruta se suma el jengibre, una raíz popularmente empleada como condimento y que, igualmente, es reconocida por sus usos con fines medicinales. Según el portal Healthline, este alimento se compone de gingerol, un compuesto al que se le atribuyen acciones antioxidantes y antiinflamatorias.
En el listado de ingredientes también figuran los arándanos, frutos que son famosos por sus propiedades para eliminar las toxinas del cuerpo y por su efecto antioxidante. Mientras que la col rizada también destaca por su composición nutricional, como indica un artículo de Consumer Reports, esta es especialmente rica en vitaminas C y K.
Esta receta es compartida por Carla Zaplana, dietista y nutricionista, y referenciada por el portal Cuerpo Mente.
Los ingredientes que se necesitarán para esta receta, aparte de un vaso de zumo de naranja y un pequeño pedazo de jengibre, son:
- Una taza de arándanos
- Dos hojas de kale o col rizada
- Un plátano
- Medio pepino
- Tres ramas de perejil
La preparación de esta bebida es rápida y fácil de hacer. El primer paso, importante en toda receta, es lavar muy bien los ingredientes que se utilizarán. Una vez estén limpios, se debe elaborar el jugo de naranja, extrayendo el líquido de dos unidades de esta fruta para poder integrarlo con los demás elementos.
En una licuadora o procesadora se deben agregar la col rizada, el pepino, el perejil y el jengibre. Esta primera mezcla se debe licuar solo un poco, preferiblemente cinco minutos, para luego añadir el banano. Según indica el referido portal, en el siguiente paso se adicionan el banano en pedazos y los arándanos, y luego se procesa nuevamente hasta obtener una consistencia homogénea.