La linaza brinda diversos beneficios saludables al organismo. Se puede consumir en forma de aceites o de semillas, ya sean enteras o molidas. De cualquier forma que se utilice, agregarla a la dieta trae bondades para la salud por su composición de fibras y omega 3.
Los expertos en nutrición recomiendan la linaza molida debido a que es más fácil de digerir. La semilla entera puede pasar por el intestino sin digerirse, lo cual significa que el cuerpo no aprovechará todos los beneficios, dicen especialistas del instituto de investigación Mayo Clinic.
Es común que la linaza se adicione en forma de semilla a los alimentos, a la preparación de postres y a las ensaladas; sin embargo, sus bondades también pueden aprovecharse mediante el consumo de agua elaborada con las mismas.
Es larga la lista de propiedades y bondades que le aporta esta bebida al cuerpo. Como ya se mencionó, esta semilla es rica en fibra y ácidos grasos omega-3, los cuales son favorables para cuidar la salud del cerebro, el corazón y la piel.
Según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la mitad de las calorías de la linaza proviene precisamente de estas grasas, las cuales ayudan a reforzar el colesterol “bueno”. La citada fuente indica que esta semilla tiene la posibilidad de reducir el colesterol total en la sangre y los niveles de LDL, conocido como el colesterol “malo”, lo cual incidiría en una disminución del riesgo de padecer de una enfermedad cardiaca.
Adicionalmente, cerca del 28 % del peso de la semilla es fibra dietética, según indica una publicación del portal Mejor con Salud. “De esta, el 25 % es fibra soluble que reduce la absorción de colesterol y la glucosa. Mientras que el 75 % restante es fibra insoluble que aumenta el volumen de las heces y reduce el tiempo del tránsito intestinal”. Estos beneficios llevan a evitar que las personas padezcan de estreñimiento.
La linaza también contiene ácido linoleico, que es necesario para formar eicosanoides antiinflamatorios. Estos aportan en la prevención de enfermedades crónicas como la artritis y el asma.
De igual forma, estas semillas son una buena fuente de vitaminas B1, B2 y B6 y minerales como cobre, fósforo, magnesio y magnesano. Estas vitaminas y minerales ayudan al cuerpo a recuperar energía, potencian el sistema inmunológico, el sistema nervioso, los huesos, mejoran el ritmo cardiaco y muchos otros procesos corporales, indica la Biblioteca Nacional de Medicina.
Aliadas de la pérdida de peso
Por su riqueza en fibras vegetales, la linaza es una de las mejores aliadas para las dietas con fines de perder peso, todo en el marco de una alimentación saludable y la práctica regular de ejercicio. Sus propiedades ayudan a tener una mejor digestión, aceleran el metabolismo y proporcionan sensación de saciedad.
Además, el consumo regular de linaza hace que los músculos se recuperen con rapidez. Esto sucede gracias a que estimula la utilización de las grasas para obtener energía. Como consecuencia, se logra quemar grasa y bajar de peso.
¿Cómo preparar agua de linaza?
Esta es una bebida ligera que puede ayudar tanto a hidratarse como a saciar el apetito cuando la persona tiene ansiedad por comer entre horas, precisa Mejor con Salud.
Para preparar el agua de linaza solo se requiere de una taza de agua, una cucharadita de linaza molida y opcional miel de abejas si se quiere endulzar. Se hierve la taza de agua y cuando esté tibia se agregan las semillas de lino molidas, se deja reposar durante 30 minutos y cuando se haya formado un gel con el agua se procede a consumirlo.
Esta agua se puede acompañar con batidos o jugos naturales. Algunas personas también agregan canela en rama o el jugo o cáscara de un limón para darle un sabor diferente, indica la mencionada fuente.