Si bien es cierto que hacer ejercicio puede ayudar a bajar de peso y a fortalecer el cuerpo, es importante entender que no todos los organismos necesitan de las mismas rutinas, por lo que es indispensable contar con expertos que ayudarán según la necesidad de cada quien a evitar posibles lesiones.
Para perder peso no solo se necesita intención, sino también disciplina, puesto que es indispensable, teniendo en cuenta que algunos ejercicios no son aptos para todas las personas, y tampoco todos desean ir al gimnasio o practicar un deporte, porque, quizá, tienen enfermedades como la artritis reumatoide que afectan su calidad de vida, u optan por dietas que prometen quemar grasa.
Por ejemplo, la National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases desmiente el mito que hay en el pensamiento colectivo, sobre realizar ejercicios con levantamiento de pesas, “que no queman calorías, y si aumentan los músculos”. Con respecto a esto, la entidad nombrada asegura que para que los músculos se agranden incide el factor genético, y la clase de rutinas física que se lleve a cabo.
¿Qué comer después de hacer ejercicio?
La Clínica Mayo da algunos consejos que pueden ayudar antes y después del entrenamiento:
- Desayuno: si el ejercicio se realiza en la mañana, la entidad recomienda que se consuman carbohidratos, mismos que pueden ayudar a realizar mejor los ejercicios y permitir mayor rendimiento. Entre los alimentos que se pueden incluir se encuentran: el yogur, los cereales y el plátano, por ejemplo.
- Cena: si se desea comer luego de hacer ejercicio, la organización americana aconseja hacerlo dos horas después con alimentos que sean ricos en hidratos de carbono para que los músculos se recuperen.
El café también se considera un aliado que puede ayudar en el rendimiento físico, sin embargo, no se recomienda su alto consumo, es decir, más de cuatro tazas de café, ya que este alimento al tener cafeína impacta el sistema nervioso y altera el sueño, una actividad indispensable para la renovación del cerebro y la recuperación del cuerpo. Sin embargo, es útil consumirlo antes de hacer ejercicio.
Entre esto, es importante destacar las porciones que se deben comer, por ejemplo, si es un snack, máximo 3 horas antes del entrenamiento, pero si son comidas fuertes entre 4 horas.
No se recomienda consumir comidas minutos antes de realizar algún ejercicio porque puede ser contraproducente, tanto que puede producir dolores estomacales o cansancio.
Los consejos antes y después para hacer ejercicio
En estas rutinas alimenticias, para hacer antes o después del ejercicio, no se puede omitir el consumo de agua que contrarresta todo tipo de afecciones, tales como, el estreñimiento que se entiende como la dificultad para evacuar porque las heces son grumosas y secas.
No obstante, explica que si se realiza ejercicio de más de 60 minutos se aconseja consumir bebidas energizantes que le dan vitalidad al cuerpo. Pero se debe tener en cuenta que estas no tienen un valor nutritivo, según un artículo publicado por la Universidad Central asegura que este tipo de productos, aunque se obtienen de manera fácil en el mercado, no significa que sean necesariamente saludables.
Es importante entender el dinamismo de cada cuerpo y el objetivo que se quiere cumplir y depende a ello se determina la intensidad de las rutinas físicas, por lo que consultar con un profesional de la salud es importante para no sobrecargar el cuerpo y alimentarlo debidamente.
Los síntomas de hacer ejercicio en exceso
La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, sugiere observar cómo el cuerpo responde luego de rutinas intensas de ejercicio, que si el cuerpo se siente cansado más de lo normal puede ser una señal negativa que indica un exceso de actividad física. Entre los síntomas que se describe se encuentran: la depresión, el insomnio, y/o la ansiedad.
Es de destacar que se considera que el ejercicio es una actividad que ayuda a combatir trastornos como la depresión, por ejemplo, por lo que puede perjudicar al cuerpo.