La ruda ha sido una planta que no ha faltado en los hogares para aliviar, con sus hojas, los dolores relacionados con heridas y tener una rápida cicatrización, también se utiliza como consumo directo en ensaladas y sopas, e incluso se dice que tiene propiedades para alejar y evitar las ‘malas vibraciones’.

La tradición de estas propiedades curativas y energéticas se atribuye a los conocimientos ancestrales que las generaciones pasadas han ido engendrando en las modernas. Tanta es la devoción a la ruda que se considera uno de los alimentos folclóricos por excelencia en América del Sur, a pesar de que provenga de Europa y Asia.

Una bebida tradicional para tratar algunas enfermedades comunes. | Foto: Getty Images

El té de ruda es una bebida altamente utilizada para remediar el malestar estomacal, para superar episodios de gripa, para aliviar los cólicos menstruales, inclusive para poder conciliar el sueño y tratar la ansiedad de manera natural, no obstante, como todos los alimentos tiene sus contras.

El más conocido y extendido tradicionalmente es que este té no lo pueden beber niños ni mujeres embarazadas, una regla muy estricta que seguramente en los hogares donde se consume se mantiene inapelable. Tampoco se le permite tomar de este té a las madres lactantes ni a las personas con problemas en los riñones, el hígado y relacionados con el corazón y la circulación sanguínea.

Tanto la medicina naturista como la científica están de acuerdo en que la ingesta recurrente del té de ruda puede causar dependencia y toxicidad a la persona que la consume. Tanto así que se aconseja que esta bebida sea tomada ocasionalmente ya que las consecuencias de ingerirla repetidamente podría causar afecciones internas al cuerpo y crear una adicción a este té.

En los menores de edad está totalmente prohibido su consumo debido a que este té les puede causas dolores digestivos llevando a vómitos y diarreas fuertes, además de causar daños en órganos como al hígado y los riñones. Para los más pequeños que aún se alimentan con leche materna, si la madre llega a ingerir este té, puede causarles espasmos, y a la propia mamá le provocaría problemas en el útero además de aumentarle el flujo sanguíneo, alterando su sistema circulatorio.

Las propiedades de este té ayudan a varias dolencias corporales. | Foto: David Marchal

La recomendación de ingerir este té de manera eventual es vital para que ningún miembro de la familia esté en riesgo de sufrir alguna anomalía en su cuerpo o crear dependencia a esta bebida. Al té de ruda también se le unen el té de guaraná y de orégano, con los cuales hay que tener cuidado con su consumo.

La planta de la ruda también se utiliza para la realización de baños de purificación y de eliminación de residuos en la piel, y tradicionalmente para sellarlo de malas energías. En este caso las excepciones van dirigidas nuevamente a las mujeres embarazadas y a las que se encuentran pasando por el periodo menstrual.

Estos baños folclóricos son sumamente llamativos y realizados para atraer la buena suerte, la abundancia y la prosperidad. Incluso las personas y gurús que realizan este baño se aseguran de portar vestimenta blanca al momento de terminar el baño, además de aclarar que el cuerpo debe secarse por si solo, sin necesidad de una toalla para que el rito funcione.

Este té está prohibido para las mujeres embarazadas y lactantes. | Foto: Getty Images / Maki Nakamura

En caso de que sea una de las personas que consume seguidamente este té, o tenga a un conocido o familiar que lo haga, puede convertirse en un agente de prevención para así evitar los riesgos que el té de ruda trae consigo. La clave está en utilizar esta bebida con responsabilidad, y también con convicción, para que al final se recupere de su dolencia y no poner en riesgo la salud a corto o mediano plazo.