Las vitaminas y nutrientes son esenciales para el buen funcionamiento del cuerpo, tanto en el interior como en el exterior, que pueden ser adquiridas a través de una alimentación saludable y equilibrada. Aunque, también existen suplementos vitamínicos que elevan estos componentes en el cuerpo evitando deficiencias en el cuerpo.
Dentro de las opciones de vitaminas, necesarias para el cuerpo, se encuentra la del grupo F, la cual es posible encontrarla en alimentos naturales y que ayudan en la prevención de ciertas enfermedades crónicas. Este tipo de componente posee dos ácidos grasos poliinsaturados esenciales, los cuales son el ácido alfa-linolénico (ALA) y el ácido linoleico (LA), es decir, un ácido graso omega-3 y omega-6.
Vitamina F
De acuerdo con el portal de la Clínica Cleveland de Florida, centro médico académico que brinda atención clínica y hospitalaria, líder en investigación, la vitamina F contribuye a la prevención de problemas relacionados con el corazón, reducir los niveles elevados de colesterol, así como disminuir el riesgo de padecer alzhéimer, demencia u otras enfermedades cognitivas.
Aunque el cuerpo no puede producir este ácido graso, por fortuna existen alimentos que lo contienen. Algunos de ellos son los pescados azules, como el salmón, el atún o la sardina; frutos secos, como las nueces, avellanas, almendras, entre otros; semillas, como la linaza, semillas de chía y de girasol; aceites, como el de linaza, canola y de nuez.
Otras de las fuentes que tienen grandes beneficios y son ricos en vitamina F son la soja, que también tendría más proteínas que la carne, el tofu, las verduras de hojas verdes y el kiwi. Asimismo, el aguacate y las espinacas, por su gran aporte en ácidos grasos omega-3, vitamina K, hierro y calcio.
¿Cuáles son los beneficios?
- Ayuda al buen desarrollo cerebral de los niños. Incluso, las mujeres en estado de embarazo y lactancia también le aporta nutrientes esenciales.
- Permite mantener un corazón sano, así como previene problemas cardíacos, como la enfermedad coronaria.
- Es clave en la salud del cerebro y prevención de problemas cognitivos.
- Ayudan a prevenir la caída del cabello.
- Controla los síntomas de la artritis reumatoide, así como la inflamación por el consumo de los medicamentos para esta afección.
- Ayuda con el desarrollo y la función de la retina, incluido el alivio de los síntomas del ojo seco, entre otros beneficios de la salud ocular.
- Para la piel tiene múltiples propiedades que ayudan a cuidar la piel; así como ayuda con el acné, la sequedad y las arrugas.