La diabetes puede causar amputación de miembros inferiores, insuficiencia renal, ceguera, entre otras complicaciones a la salud de las personas que la padecen.

Al momento de recibir el diagnóstico de esta enfermedad se debe iniciar un tratamiento. Una dieta saludable, ejercitarse regularmente y mantener un peso saludable son clave para gestionarla. “El tratamiento de la diabetes consiste en llevar una dieta saludable y realizar actividad física y en reducir la glucemia y otros factores de riesgo conocidos que dañan los vasos sanguíneos. Además, para evitar las complicaciones, los fumadores deben abandonar el hábito”, explica la OMS.

Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explica que “una dieta para la diabetes se basa en comer tres comidas al día a horas regulares. Esto te ayuda a utilizar mejor la insulina que tu cuerpo produce o recibe a través de un medicamento”.

Es importante elegir los alimentos más saludables para ayudar a regular los niveles de glucosa en la sangre y disminuir el riesgo de que se incrementen exageradamente. “El azúcar en su sangre proviene de ciertos alimentos llamados carbohidratos. Los alimentos con alto contenido de carbohidratos incluyen caramelos y dulces, refrescos, panes, tortillas y arroz blanco. Cuantos más carbohidratos consuma, mayor será su nivel de azúcar en sangre”, explica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Cabe aclarar que en caso de recibir un diagnóstico de diabetes se deben seguir todas las recomendaciones médicas, especialmente las brindadas por un nutricionista. A continuación, la entidad de salud Mayo Clinic brinda algunas recomendaciones generales. Por eso, antes de realizar cambios en la dieta se debe acudir a un profesional.

  • Carbohidratos saludables: estos incluyen frutas, vegetales, cereales integrales, legumbres, productos lácteos bajos en grasa (queso y leche).
  • Alimentos ricos en fibra: vegetales, frutas, nueces, legumbres, y cereales integrales. Estos son claves para ayudar a regular los niveles de glucosa en la sangre.
  • Pescados: los expertos de Mayo Clinic recomiendan el consumo de pescados dos veces a la semana, para contribuir a la salud cardíaca. Se pueden elegir el salmón, la caballa, el atún y las sardinas. Lo ideal es consumirlos asados o de otro tipo, pero no frito.
  • Grasas saludables: incluir alimentos que tengan grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas. Algunos de estos son el aguacate, nueces, aceite de canola, aceite de oliva o de cacahuate.

Un ejemplo de estas recomendaciones, en palabras de Mayo Clinic, es el siguiente:

  • Desayuno Pan integral (1 rebanada mediana) con 2 cucharaditas de jalea, 1/2 taza de cereal de trigo triturado con una taza de leche baja en grasa al 1 %, una fruta, café.
  • Almuerzo Sándwich de carne asada en pan de trigo con lechuga, queso americano bajo en grasa, tomate y mayonesa, manzana mediana, agua.
  • Cena Salmón, 1 1/2 cucharadita de aceite vegetal, papa pequeña al horno, 1/2 taza de zanahorias, 1/2 taza de alubias verdes, panecillo blanco mediano, té helado sin azúcar, leche.
  • Refrigerio 2 1/2 tazas de palomitas de maíz con 1 1/2 cucharadita de margarina.

Alimentos que se deben evitar

La Biblioteca explica que se debe moderar el consumo de los siguientes alimentos y bebidas:

  • Alimentos azucarados como dulces, galletas, pasteles, helados, cereales endulzados y frutas enlatadas con azúcar agregada.
  • Bebidas con azúcares añadidos, como jugos, refrescos regulares y bebidas deportivas o energéticas regulares.
  • Arroz blanco, tortillas, panes y pastas, especialmente los elaborados con harina blanca.

¿Cuáles son los factores que afectan los niveles de glucosa en la sangre?

Según explican los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, hay diferentes de las que pueden afectar los niveles de azúcar en el torrente sanguíneo:

  • Dificultad para dormir.
  • No desayunar.
  • Tomar café.
  • Consumir endulzantes artificiales.
  • Estar deshidratado.