Las instituciones de salud frecuentemente instan a mantener una dieta rica en frutas y verduras, junto con aquellos productos saludables que no contengan grasas saturadas y trans, con el fin no solo de mantener vital el organismo, sino combatir el sobrepeso, que de acuerdo con la Organización Mundial para la Salud (OMS) “en 2016, el 39 % de las personas adultas de 18 o más años tenían sobrepeso, y el 13 % eran obesas”.
Es entonces que en la actualidad muchos productos son usados para adelgazar, pero se encuentran relacionados con cáncer, como por ejemplo:
Productos ‘light’
La Asociación Diabetes Madrid explica que desde los años 80, los productos ‘light’ son aquellos que usan sacarina -edulcorante sintético- en vez de azúcar. Es entonces que muchas personas creen que al incluirlos en una dieta balanceada, estos colaboran en la pérdida de peso porque anuncian que su contenido es bajo en calorías, pero necesariamente no es así.
Resulta que según la Comisión Interministerial para la Ordenación Alimentaria (CIOA), un producto que se clasifica como ‘light’ debe tener en su contenido “menos del 30 % de valor energético a comparación del producto de referencia”, y que según la Asociación, muchos fabricantes no cumplen con lo prometido en las etiquetas de los productos y las calorías no son menores, sino que quizá, igual que siempre.
El artículo “Endulzantes artificiales y riesgo de cáncer: resultados del estudio de cohorte basado en la población de NutriNet-Santé” presidido por Charlotte Debras, Eloi Chazelas, Bernard Srour, Nathalie Druesne-Pecollo y otros autores, señala que dentro de los hallazgos del estudio, los resultados arrojaron que los edulcorantes artificiales que se usan en algunas bebidas destacan algunos factores de riesgos para el desarrollo del cáncer. Entre ellos, el aspartamo y acesulfamo que se relacionan con la obesidad y el cáncer de mama.
La investigación consistió en valorar a 102.865 adultos mientras consumían productos industriales para obtener informes dietéticos de 24 horas.
El café
La Society American Cancer cita algunos estudios que aseveran que el consumo de café puede provocar el desarrollo de enfermedades terminales; sin embargo, existen otros que desaprueban esto gracias a las propiedades antioxidantes que tienen sus componentes, como la cafeína, que según Tua Saúde, contribuye en la pérdida de peso.
Asimismo, explica que otras investigaciones dieron como resultado una alta ingesta de café para obtener sus propiedades: entre cuatro a seis tazas al día, asegurando que es una alta cantidad que puede ser dañina para el organismo, provocando en algunos casos migrañas, malestares estomacales e insomnio, porque actúa sobre el sistema nervioso central. Por lo que la Clínica Mayo sugiere máximo cuatro tazas al día.
Por su parte, Infosalud cita a Charles Fuchs, director del Centro de Cáncer Gastrointestinal en Dana-Farber, quien manifiesta: “Vimos que los bebedores de café tenían menor riesgo de que el cáncer regresase y una significativamente mayor supervivencia y posibilidades de curación”.
Sin embargo, la entidad sugiere que el consumo de bebidas calientes está vinculado, en algunos casos, al cáncer de esófago.
Alimentos con gluten
La Asociación Americana de Cáncer señala que quienes tienen un diagnóstico de enfermedad celíaca, tienen riesgo de cáncer debido a que el gluten provoca una respuesta inmunitaria.
También esta enfermedad se ve asociada con la inflamación de los intestinos y estos incrementan las posibilidades de cáncer gastrointestinal. “Hay muy poca evidencia que vincule la ingesta de gluten con el riesgo de cánceres gastrointestinales en la población general”, dice.
Por ejemplo, algunos cereales son ricos en gluten e incluidos en dietas balanceadas para adelgazar, por lo que se recomienda siempre verificar cada uno de sus componentes antes de su ingesta y evitar complicaciones sobre la salud.