La piel utiliza la luz solar para ayudar a fabricar la vitamina D, la cual es importante para la formación normal de los huesos, pero algunas veces los rayos ultravioleta pueden ser muy perjudiciales, de acuerdo con Medline Plus, web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Por tal razón, el Grupo Sanitas de España reveló algunos beneficios del sol para el organismo humano:

- Mejora en la respuesta muscular.

- Mejora la resistencia en pruebas de tolerancia.

- Disminuye la presión sanguínea.

- Incrementa la respuesta inmunológica.

- Reduce la incidencia de infecciones respiratorias.

- Baja el colesterol de la sangre.

- Incrementa la hemoglobina de la sangre.

- Mejora la capacidad de trabajo cardiovascular.

- Estimula las terminaciones nerviosas.

- Mejora la respiración, especialmente en asmáticos.

- Promueve la síntesis de vitamina D para calcificar huesos.

No obstante, en su portal web la institución también explicó los riesgos de una exposición prolongada y sin la protección adecuada a la radiación ultravioleta:

- Aparición de eritemas. Se caracterizan por el enrojecimiento de la piel expuesta al sol y precede a la quemadura.

- Quemaduras de primer y segundo grado.

- Cáncer de piel y otros trastornos cutáneos.

- Cataratas y otros trastornos de la vista.

- Envejecimiento prematuro de la piel.

- Inhibición del sistema inmunitario.

La organización Kids Health, especializada en salud para padres, niños y adolescentes, publicó un informe en su sitio web en el que explica que en el mercado existen varios tipos de protectores: cremas, geles, espray y sticks (aplicadores en bastón o barra).

“Las cremas van muy bien para las áreas de piel seca, los bastones ayudan alrededor de los ojos y los geles van bien en las áreas con pelo (como el cuero cabelludo)”, señala el documento, que fue revisado por la Dra. Kathleen M. Cronan, especialista de la División de Medicina de Atención de Urgencias del Hospital Nemours en Wilmington, Estados Unidos.

Por tal razón, a la hora de comprar un protector solar, los expertos de Kids Health recomiendan verificar tres aspectos básicos en la etiqueta del producto. A continuación se presentan esas recomendaciones.

- Verificar que el producto tenga un FPS (factor de protección solar) de 30 o superior.

- Es necesario que el protector sirva tanto contra los rayos UVA como contra los rayos UVB (se recomienda un protector solar de “amplio espectro”).

- Seleccionar un protector que sea resistente al agua (que proteja a los niños mientras estén dentro del agua durante 40-80 minutos).

Otros aspectos a tener en cuenta es que el producto no contengan PABA, ya que pueden causar alergia en la piel. Por otro lado, si la decisión es comprar un protector autobronceador, lo aconsejable es verificar que el producto también tenga protección UV.

“Los rayos UV emitidos por el sol activan las células denominadas melanocitos, que son las encargadas de producir melanina, el pigmento que da color a nuestra piel”, asegura Marinesa Meca, experta del laboratorio francés SVR Laboratoire Dermatologique, en declaraciones citadas por el portal Hola de España.

La recomendación es que aproximadamente veinte minutos antes de que la persona salga de casa se aplique protector solar sobre el rostro, incluyendo los párpados, como también sobre el dorso de los pies o la espalda. En el caso en que la persona esté en una piscina o en el mar, se recomienda que aplique el protector solar cuando la piel esté seca.

“(...) Tras una larga exposición solar y si no hemos protegido adecuadamente la piel, la sobreproducción de melanina causará la aparición de estas manchas llamadas lentigo, que son permanentes y requerirán un tratamiento específico dermatológico e incluso médico para desaparecer”, agrega la experta Marinesa Meca.