Hay millones de personas alrededor del mundo que buscan perder peso. Mientras que en el mercado se consiguen un sinfín de productos que prometen ayudar a adelgazar en cuestión de semanas –a veces con resultados poco creíbles–, en internet circulan centenares de recetas cuyas promesas son similares.
Esto sin dejar de lado los diferentes tratamientos estéticos que están a la mano para perder esos kilos de más que a algunos les incomodan, mientras que otros necesitan bajar de peso por cuestión de salud.
La pérdida de peso no es un tema que deba ser tomado a la ligera, por el contrario, consta de un sinnúmero de aristas a considerar. La alimentación es el eje principal para lograr este objetivo; debe ser sana y equilibrada. Sumado a lo anterior, ha de estar acompañada por un buen descanso, actividad física y la adopción de hábitos que contribuyan a tener una vida saludable.
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, “la evidencia demuestra que las personas que bajan de peso en forma gradual y constante (entre 1 y 2 libras por semana) logran mejores resultados en no volver a recuperarlo”.
Señala que no importa cuál sea el objetivo para bajar de peso. De hecho, si la persona logra bajar entre 5 % y 10 % del total del peso corporal, es probable que logre tener resultados muy buenos para su salud, como mejoras en la presión arterial, el colesterol y la glucosa en la sangre.
La agencia del Departamento de Salud y Servicios Humanos estadounidense explica que si, por ejemplo, una persona que pesa 200 libras pierde el 5 % de su peso –10 libras–, bajaría a 190 libras. “Si bien este peso puede estar todavía dentro de los valores de sobrepeso u obesidad, esta pérdida modesta puede disminuir sus factores de riesgo para las enfermedades crónicas relacionadas con la obesidad”, dice.
La adopción de nuevos hábitos de alimentación y de actividad física no solo le permitirán al individuo perder peso, sino también a llevar una vida más saludable y, además, a no recuperar el peso perdido con el paso del tiempo.
“Un estudio que incluyó a los participantes del Registro Nacional de Control del Pesoexternal reveló que quienes perdieron una cantidad significativa de peso y no lo recuperaron, reportaron mejoras no solo en cuanto a su salud física, pero también en su nivel de energía, movilidad física, estado de ánimo general y autoestima”, señala la agencia.
Diuréticos
Los diuréticos naturales pueden ser una buena herramienta para bajar de peso de forma segura, ayudan a eliminar la sal (sodio) y el agua sobrantes del organismo. La mayoría de ellos ayudan a que los riñones liberen más sodio en la orina. También eliminan electrolitos y toxinas del cuerpo, y regulan la digestión. Además, los diuréticos son empleados para regular la presión arterial y evitar la acumulación de líquidos.
La papaya y la sandía son dos frutas que trabajan como diuréticos naturales en el organismo, más del 90 % de la composición de las dos es agua. La enzima papaína y el alcaloide carpaína presentes en la papaya ayudan a una mejor digestión de los alimentos y a quemar las grasas acumuladas en el organismo. Entre tanto, las propiedades diuréticas de la sandía o patilla contribuyen en la eliminación de toxinas, además de tener capacidad laxante en el organismo. Asimismo, la sandía genera sensación de llenura.
Por su parte, la piña es una fruta con propiedades laxantes, diuréticas y depuradoras del organismo, gracias a su alto contenido de bromelia, asparagina y arginina, compuestos que contribuyen en la eliminación de líquidos. El consumo de este fruto de color amarillo en su interior ayuda a perder peso, acelerar el proceso digestivo y a fortalecer el sistema inmune.
El tomate es rico en antioxidantes como vitamina C, selenio, betacaroteno y licopeno, que ayudan con la prevención de enfermedades degenerativas crónicas y el envejecimiento. También es un potente diurético y tiene un efecto saciante, ideal para regular la presión arterial y bajar de peso.
Por último está el apio, un vegetal rico en vitaminas A y C, flavonoides, y glucósidos que tiene un potente efecto antioxidante para el organismo. Sus propiedades diuréticas se deben a la presencia de apiol y apigenina en su aceite esencial, además de tener un efecto saciante.