El estreñimiento es una afección en la cual la persona podría tener menos de tres evacuaciones a la semana, de acuerdo con el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales que hace parte de los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos.
Además, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, indicó que otros síntomas son:
- Tener heces grumosas o duras.
- Hacer esfuerzo para defecar.
- Sentir como si tuvieras una obstrucción en el recto que evita que puedas defecar.
- Sentir como si no pudieras vaciar completamente el recto.
- Necesitar ayuda para vaciar el recto, como usar las manos para presionar tu abdomen y usar un dedo para quitarte las heces del recto.
Sobre la misma línea, puntualizó que los factores que pueden aumentar el riesgo de tener estreñimiento incluyen: ser un adulto mayor; ser mujer; estar deshidratado; tener una dieta baja en fibras; hacer muy poca actividad física o ninguna; tomar ciertos medicamentos incluidos los sedantes, estupefacientes, algunos antidepresivos o medicamentos para bajar la presión arterial; padecer un trastorno mental, como depresión o un trastorno de la alimentación.
Por ello, la revista Clara reveló los diez mejores laxantes caseros para combatir el estreñimiento:
1. Infusión de arraclán.
2. Zumo de hinojo.
3. Infusión de semillas de lino.
4. Infusión de poleo.
5. Infusión de agar-agar.
6. Infusión de manzanilla.
7. Infusión de zaragatona.
8. Compota de manzana (con piel) y ciruelas secas con agua.
9. Tomar agua. Los hombres deberían tomar 13 tazas de agua al día y las mujeres nueve tazas. Sin embargo, el consumo de agua puede variar dependiendo de las actividades que se realicen día a día. Por ejemplo, si la persona hace ejercicio debe consumir más agua, para cubrir la pérdida de líquidos. Asimismo, si el clima es cálido y se suda más, es recomendable aumentar la ingesta de agua, o si una mujer está embarazada, es posible que necesite más líquidos.
Por su parte, otras recomendaciones que ayudan a evitar el estreñimiento, según Mayo Clinic, son:
- Consumir menos alimentos con bajo contenido de fibra, como los alimentos procesados y los productos lácteos y la carne.
- Mantenerse lo más activo posible y hacer ejercicio periódicamente. Lo ideal es seguir las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes.
- Controlar el estrés.
- Cuando se sienta el impulso de defecar, no pasarlo por alto.
- Procurar establecer horarios regulares para evacuar el intestino, especialmente después de una comida.
Complicaciones del estreñimiento
- Inflamación de las venas del ano (hemorroides). Hacer fuerza para evacuar los intestinos puede provocar una inflamación de las venas que se encuentran en el ano y alrededor de este.
- Ruptura de la piel del ano (fisura anal). Las heces grandes o duras pueden provocar pequeñas rupturas en el ano.
- Heces que no pueden eliminarse (retención fecal). El estreñimiento crónico puede provocar una acumulación de heces duras que se atascan en los intestinos.
- Intestino que sobresale a través del ano. Esforzarse para evacuar los intestinos puede hacer que una pequeña porción del recto se estire y sobresalga a través del ano.
De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.