La salud física no es un chiste. A fin de contar con un buen estado físico y para el correcto funcionamiento de los diferentes órganos del cuerpo, cada vez son más las personas interesadas en llevar un estilo de vida saludable, uno que incluya ejercicio, buenos hábitos y una dieta balanceada, consumiendo alimentos especiales que sirvan para mejorar algún problema.
En ese sentido aparecen las frutas, que siempre son recomendadas por los médicos para ser incluidas en un menú lleno de vitaminas y minerales. Por su variedad, hay desde las dulces, las cuales ayudan a mejorar la digestión, hasta las ácidas, que promueven a la estimulación de las secreciones glandulares y a equilibrar la tensión arterial.
Así, algunas como el limón, la lima, la naranja, la mandarina, la fresa o la piña cuentan con un alto porte de ácido ascórbico o vitamina C y ácido cítrico, componentes que el cuerpo utiliza como parte de diferentes procesos metabólicos.
Además, considerando solo a la piña, puede decirse que su 89% es agua, por lo que no solo tiene un sabor refrescante, sino que contribuye a la hidratación del organismo. Entre otros nutrientes, es una rica fuente de vitaminas A y C, potasio, hierro y calcio.
Con todo lo anterior en mente, su ingesta pura (en trozos o rodajas) o beber su jugo tiene numerosos beneficios en el organismo. Si bien es recomendable que las frutas se coman en ayunas, a fin de aprovechar durante toda la actividad diaria sus beneficios, pues también resulta aconsejable tomarla durante la noche, pues contiene bromelina o bromelaína, una enzima encargada de ayudar a la digestión.
Por esto, un vaso antes de ir a dormir ayudará en gran manera a que el tráfico intestinal trabaje con regularidad.
También por su consumo nocturno se podrá acceder a la melatonina que contiene, hormona que ayuda a reestablecer el ritmo cardiaco y el ciclo del sueño. Esto le ayudará al cuerpo cuándo y cuánto debe dormir, mejorando el descanso diario.
Otros beneficios de la piña vienen por ser un foco de antioxidantes, por los que aporta en la lucha contra el estrés y otros males. Su riqueza en vitamina C la convierte en un agente reductor de enfermedades y estimula al sistema inmunológico. Por otra parte, disminuye la inflamación, actuando como vitamina curativa gracias a la presencia de colágeno.
¿Cuáles son los efectos de la piña en los riñones?
La piña es una fruta baja en calorías conocida por su poderosa acción depurativa y diurética. Es decir que, además de facilitar la eliminación de líquidos, controla los procesos inflamatorios del organismo.
De hecho, el tratamiento natural a base de jugo de piña puede ayudar al buen estado de los riñones, ya que contiene vitamina C, potasio y enzimas, que en conjunto permiten reducir la inflamación, combatir las infecciones, estimular la digestión y reducir el riesgo de la formación de cálculos renales, según Univisión en su sección de salud.
De igual manera el portal Vix señala que el agua de piña tiene buenos efectos en el cuidado de estos órganos.
Para preparar el jugo se deben cortar pequeños trozos hasta obtener la cantidad de una taza pequeña, para luego batir en una licuadora, junto a una taza de leche de arroz, hasta que el batido esté completamente procesado. Esta preparación puede también hacerse simplemente con agua y añadirle algún endulzante natural gusto. Esta agua se debe consumir todos los días en ayunas.
Mientras que la piña es una poderosa herramienta para el beneficio de los riñones, algunas sustancias como las bebidas gaseosas, aquellos alimentos con exceso de sodio, la cafeína o el alcohol son riesgos para tal órgano.