La leche es el fluido biológico que segregan las hembras de los mamíferos y cuyo papel es aportar los nutrientes y la energía necesarios para el crecimiento y el desarrollo de las crías durante los primeros meses de vida.
Se considera un alimento básico y equilibrado por su elevado contenido en nutrientes con relación a su contenido calórico; tiene por esto una excelente densidad nutricional.
Aporta proteínas de alto valor biológico e hidratos de carbono, fundamentalmente en forma de lactosa, además de grasas y minerales como calcio, magnesio, fósforo y zinc; tiene vitamina D y A y del complejo B.
Sin embargo, hay expertos de la salud que están a favor y, otros, en contra de consumir la leche todos los días.
Para unos, este alimento siempre debe formar parte de la dieta diaria, pues este producto de origen animal, va a hacer que el funcionamiento del organismo mejore considerablemente. Hasta aconsejan tomarlo en ayunas porque obtendrá muchos beneficios en el cuerpo.
Entre esos beneficios está prevenir enfermedades de los huesos o relacionadas con la falta de calcio y vitamina D, como: la osteoporosis. Además, para combatir el colesterol o la diabetes, ya que tiene fósforo, yodo, selenio y ácidos grasos Omega 3.
Tomar leche a diario puede contribuir a perder peso con mayor facilidad porque aporta calorías al cuerpo y va a ayudar que se sienta saciado.
Aunque, hay otros expertos que dicen que este producto no es de todo beneficioso, ya que la mayoría de la población es sensible a los lácteos y puede experimentar efectos secundarios si se consume todos los días. Entre esos efectos está:
- Náuseas: según una investigación del Instituto Nacional de Salud, el 65 % de los adultos tiene algún tipo de intolerancia a la lactosa. Eso es casi 3 de cada 4 personas en todo el mundo. Los síntomas pueden incluir náuseas y, en casos extremos, vómito, luego de haberla consumido.
La intolerancia a la lactosa tiende a ser más común en personas de ascendencia asiática, sudamericana o africana. Los expertos de la salud recomiendan no beber la leche cruda.
- Distensión abdominal y malestar digestivo: si no puede descomponer fácilmente la lactosa, está viaja a través del sistema digestivo y es degradada por las bacterias intestinales en un proceso de fermentación. Los efectos secundarios incluyen los gases u otros problemas digestivos.
Cabe aclarar que, si los lácteos no lo enferman, aun sin saberlo podría causar otros problemas digestivos como: hinchazón, calambres o diarrea.
- Acné: las hormonas que se encuentran en los productos de los lácteos comerciales pueden empeorar el acné, puesto que la leche descremada es la más propensa. El cuerpo interrumpe la regulación de la insulina a través de algo llamado factor de crecimiento similar a la insulina-1 (IGF-1), lo que produce el acné.
- Podría aumentar el riesgo de ciertos cánceres: Algunos estudios han encontrado que la ingesta alta de lácteos está relacionada con un mayor riesgo de ciertos tipos de cánceres como el de próstata o el de mamá. Aunque podría conducir a un menor riesgo de otros tipos de cáncer, como el cáncer de colón.